“Que vengan los gringos y se lleven el agua, nos estarían sacando un problema de encima”, aseguró ayer un funcionario de la Dirección Nacional de Medio Ambiente en una entrevista radial en la que se lo consultó acerca de las inundaciones que afectan al norte del país y de los problemas de contaminación y falta de agua que se registran en el sur.
El domingo se cortó el suministro en casi todo el departamento de Maldonado, por lo que OSE envió seis camiones cisterna para abastecer las necesidades urgentes de la población. “Fue un operativo difícil, porque hubo que ir a buscar el agua a Brasil: la que hay acá está demasiado contaminada y deteriora el interior de los tanques”, reconoció un jerarca del ente. El corte de agua se debió a un “error humano”, algo que despertó la indignación de los habitantes del departamento, quienes durante este año tuvieron numerosos problemas por la calidad del agua potable, que presentaba valores de contaminación por encima de los aceptados, además de mal olor y color.
“Estoy harto. Si no es una cosa es la otra. Al final, no voy a tener más remedio que mudarme a algún lugar en donde haya menos problemas con el agua, como Darfur”, aseguró ayer un vecino de Maldonado a una emisora de radio local. Otra fernandina aseguró que también considera la posibilidad de instalarse en esa zona de África, aunque reconoció que se trata de un lugar “complicado”, ya que “los terrenos fértiles escasean, por lo que son frecuentes las hambrunas”. De todos modos, aseguró: “Prefiero morirme de hambre que de sed”.
También son varios los habitantes de la ciudad esteña que manejan la posibilidad de mudarse a Haití. Según explicó uno de ellos, “la red de agua potable de ahí tampoco es muy buena, pero hay unas plantas potabilizadoras de OSE que parece que son buenísimas. Se ve que no las hicieron los mismos ingenieros que diseñaron las redes uruguayas”.