Fuera de Montevideo hubo dos partidos con resultados trascendentes. En el Raúl Saturnino Goyenola, Tacuarembó volvió a ser locatario en Tacuarembó después de aquella buena experiencia con empate ante Peñarol en Rivera y de la derrota a puertas cerradas en el Tróccoli con Cerro, y consiguió un espectacular triunfo de atrás sobre Juventud. Esta victoria le sirve para tomar impulso para seguir soñando con buscar el puntaje que le permita tratar de mantenerse en la categoría; por otra parte, bajó a Juventud de la punta del Clausura, lugar en el que se había colocado por algunos minutos, mientras fue ganando 1-0. El Yesquero Cristian Palacios había puesto en ventaja a los pedrenses al arranque de la segunda parte. Un gol en contra del Búfalo Dufard dio el empate en el Goyenola, y un gol de Aldo Díaz -así lo hizo constar el juez, y no en contra de Rodrigo Cabrera, como también se pudo haber estampado en el formulario- dio el festejado triunfo del elenco de Jorge Castelli.

En Florida, en el Campeones Olímpicos, donde por más que El Tanque Sisley fije su localía, los dos equipos que jueguen son visitantes, Fénix apabulló a los verdinegros y los derrotó 3-0, para despegarse con fuerza de la zona más peligrosa de la tabla del descenso, dejando atrás a Juventud de Las Piedras y ubicándose a sólo una unidad de su rival de la tarde en la tabla que nadie quiere mirar. Lucas Cavallini fue el autor del primer gol del partido, en el primer cuarto de hora del primer tiempo; el salteño Alexander Medina volvió a sacar las flechas al anotar el segundo, al minuto de haber salido a la cancha, ya en el ocaso del complemento; y el Ñol Juan Álvez, sobre el cierre del encuentro, puso el 3-0. Fue el primer triunfo de Fénix en el campeonato, después de dos empates y dos derrotas.