Pasó el clasificatorio, la permanencia, la Súper Liga, el Súper 4, los cuartos de final y las semifinales. Muchísimos partidos, 13 equipos que comenzaron a fines de setiembre, y sólo dos con la chance de tocar la copa de campéon. Malvín y Trouville empezarán esa disputa por dejar su nombre en el máximo trofeo hoy a las 21.00 en el Palacio Peñarol.
El equipo dirigido por Pablo López eliminó el fin de semana a Hebraica y Macabi, luego de cerrar la serie 3-2 a su favor, tras estar abajo 1-2 y a 40 minutos de ser eliminado. Pero los azules se levantaron en el momento clave y mostraron su categoría.
La mejora de los extranjeros Terence Dials y Kennedy Winston fue clave. En el cuarto y quinto juego de la serie frente a los macabeos, Dials asumió su rol en los primeros minutos, para empezar a sacar la diferencia en el marcador. Winston, de una capacidad ofensiva importante, también se acomodó en las coordinaciones ofensivas y ahora tiene más confianza para tomar los tiros y atacar el aro.
Victorias cómodas
El sábado comenzó el Metropolitano femenino, con la disputa de cinco encuentros correspondientes a la primera jornada del certamen. Colón superó a Capitol 57-37, Aguada Rojo hizo lo propio ante Capurro 53-27, Cordón venció a Goes 92-18 y Aguada Verde derrotó a Unión Ciclista Maragata 52-24. En el otro juego sabatino, Malvín, el gran campeón de esta rama, comenzó con un cómodo éxito ante Albatros 102-26. Yale tuvo libre en el arranque de la temporada.
Malvín ha mostrado la mejor defensa en la fase regular, y el sábado Hebraica pudo convertir sólo 47 puntos, una cifra poco común en estas instancias. La competencia internacional que tuvo durante esta temporada también le rindió para ajustar aspectos defensivos, teniendo en cuenta que enfrentó a clubes muy potentes del continente. En la pintura es muy intenso el trabajo de Mathías Calfani y Reque Newsome, alternándose en las cortinas directas y poniendo dificultades a los sistemas de los adversarios.
En ataque, Pablo López plantea algunas situaciones claras que se repiten en los diferentes cotejos: las salidas de las cortinas indirectas de Nicolás Mazzarino -el tirador a tener en cuenta para cualquier rival-, el uno contra uno de Winston y el pick central, explotado principalmente por los bases Federico Bavosi y Fernando Martínez.
Trouville eliminó a Defensor Sporting en cuartos de final y, luego, dejó por el camino a Atenas en las semifinales 3-0, sorprendiendo por la contundencia con la que logró avanzar a la definición. El elenco rojo de Pocitos tiene a uno de los más ganadores de la LUB, el alero Joaquín Izuibejeres. El número 5 de Pocitos fue campeón en 2005-2006, cuando la T venció en la final a Aguada. Pasó a Malvín y en su tercer año en el playero volvió a ser campeón. Su tercer título llegó con la camiseta de Hebraica en la LUB 2011-2012. Por su parte, Santiago Pepo Vidal, recuperado totalmente de la fractura que lo tuvo afuera varias semanas, fue campeón con Biguá y estuvo en varias instancias eliminatorias con el pato de Villa Biarritz.
Los dirigidos por Álvaro Tito también se transformaron en un elenco destacado por su labor en defensa. El buen trabajo basado en los scouting -trabajo de recopilación de información sobre el rival de turno- y la gran intensidad que le ponen Vidal y Claudio Bascou a la primera línea le han dado grandes réditos en toda la temporada 2014-2015. Sin duda, la presencia del jamaiquino Kevin Young en la pintura es fundamental a la hora de bloquear los tiros rivales.
En ataque, lo que genera Vidal desde la base es un punto a tener en cuenta para Malvín: no sólo puede crear desde cortinas directas, fundamentalmente en el centro del campo, sino que también lo hace desde el uno contra uno, para romper y descargar a sus compañeros. Izuibejeres aporta puntos en momentos en los que su equipo más lo necesita, y la potencia del venezolano Néstor Colmenares jugando de frente al aro es otro de los ítems que no pueden faltar en un análisis de Trouville.
Los próximos encuentros de esta serie, que es al mejor de siete juegos, serán el viernes 17, martes 21 y sábado 25, día en el que puede haber campeón, en caso de que se repita el ganador en los primeros cuatro partidos. En caso contrario, la llave continuará la última semana de abril.