El miércoles se cerró la fase de grupos del torneo de clubes más importante de América, y Montevideo Wanderers Fútbol Club, único representante uruguayo en la copa, conoció el rival que enfrentará en octavos de final: Racing Club de Avellaneda. Los bohemios de Alfredo Arias recibirán a la academia el jueves 7 de mayo a las 18.30 en Montevideo -resta definirse si el partido se jugará en el Parque Central o en el estadio Centenario- y visitará a los argentinos el jueves 14 a las 18.45 en el estadio Juan Domingo Perón, más conocido como el Cilindro de Avellaneda. Los otros cruces son los siguientes: Universitario de Sucre-Tigres, que comenzarán a jugar la semana que viene, el martes 28 de abril; Estudiantes-Independiente Santa Fe, Guaraní-Corinthians, San Pablo-Cruzeiro, Atlético Mineiro-Internacional, River Plate-Boca Juniors y Emelec-Atlético Nacional. Los últimos partidos de vuelta se disputarán el jueves 14 de mayo: Nacional y Emelec cerrarán la fase de octavos en Medellín. En mayo se disputarán los cuartos de final, pero luego, en las semifinales, el torneo quedará en stand by por el comienzo de la Copa América 2015 de Chile, para volver el 15 de julio.
Mucha experiencia
Danubio, que disputó su último partido de Libertadores el miércoles con San Lorenzo, con triunfo 1-0 en Buenos Aires, integró un grupo muy complicado, terminó en la última posición de la tabla del grupo 3 pero en todos los casos -a excepción de las derrotas en Brasil- hizo un papel dignísimo, sumando experiencia para el plantel juvenil y volcándola, tal vez, en el Campeonato Uruguayo, ya que en este momento es el único puntero del Clausura, el campeón uruguayo vigente, y tiene el objetivo de conseguir el histórico bicampeonato. Ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro los franjeados de Leonardo Ramos formaron con Franco Torgnascioli en el arco; Cristian González, Matías de los Santos, Federico Ricca y Fabricio Formiliano en la defensa; Hamilton Pereira, Emiliano Ghan, Ignacio González y Leandro Sosa en la zona de volantes; y Bruno Fornaroli y Matías Castro en el ataque. El gol llegó sobre el final del partido por medio de un cabezazo de Agustín Viana, que había ingresado por Formiliano a los 75 minutos. Matías Velázquez y Nicolás Milesi también vieron minutos en Argentina. Fue una victoria muy festejada. Por el momento, porque se sabía que sería un grupo dificilísimo, por el nivel de los rivales -el campeón de América y dos grandes y multimillonarios equipos de Brasil-, por Marcelo Tabárez, por Leo Ramos. Por todos. Porque los minutos disputados y cosechados por América están dando los frutos en el ámbito local. La dinámica, la velocidad, el tiempo en que juegan Corinthians, San Pablo y San Lorenzo es claramente diferente al de Uruguay. Y Danubio fue con chiquilines y se plantó. Agustín Viana (1983), Agustín Peña (1989), Renzo Pozzi (1984), Hamilton Pereira (1987) y Bruno Fornaroli (1987) son los únicos del equipo que no nacieron en los 90. Todos los demás son chiquilines veinteañeros y otros tantos, adolescentes. El promedio de edad danubiano en la copa, sin contar a los “mayores”, es de 20,8. Espectacular. Qué no va a ser importante competir.