Nuestro ministro de Relaciones Exteriores, Rodolfo Nin Novoa, ha resultado ser un experto en políticas contra el terrorismo islámico. Su gran sagacidad ha permitido desbaratar un atentado que el peligroso Estado Islámico (EI) pensaba perpetrar en Uruguay. “Si el terrorismo no descansa, yo le contesto que no duermo”, dicen que habría dicho Rodolfo. “Gracias al gran despliegue de inteligencia, pudimos dar con una maqueta de un avión de nuestra flamante compañía de bandera nacional que, mediante una simple pintada, daba un golpe maestro”, explicó el devenido diplomático. “Imagínense el golpe que le habría dado EI al mundo si la imagen diciendo Ala’s Uruguay (‘Uruguay es de Alá’ sería la traducción) recorriera el globo”, dijo Rodolfo mientras ojeaba en internet un manual de lucha contra movimientos extremistas. “Sin lugar a dudas, habría sido peor que tener aviones que digan ‘Bolso gallina’ o ‘Montevideo es manya’”, sentenció el canciller.