La del sábado será una tarde que los hinchas de Liverpool no podrán olvidar por mucho tiempo. En su lucha de cada fin de semana por escabullirse de la zona del descenso, esta vez los de Belvedere vencieron a Racing en Sayago, en un encuentro lleno de emociones.
Todo se puso feo desde el arranque para los que festejaron al final; Ignacio Ithurralde puso el 1-0 con un preciso cocazo que Jorge Bava no pudo contener. Los papeles del director técnico liverpoolense, Mario Saralegui, no se quemaron, porque su equipo se fue con todo en busca del empate, que no tardó en llegar. El 1-1 lo puso el goleador del Campeonato Uruguayo, Junior Arias, con un remate rasante contra el palo.
El complemento arrancó con todo. Los de la Cuchilla siguieron controlando las acciones de juego, y los de Sayago se retrasaron, dejando mucho espacio para el juego. Pero los albiverdes lograron contener los ataques de los negriazules y estuvieron tranquilos en su zona, hasta que una mano en su área le brindó a Liverpool la posibilidad de ponerse por encima en el marcador, tras un claro penal sancionado por el árbitro. El penal tuvo de todo, porque lo pateó Junior Arias y porque lo atajó Jorge Contreras. En el rebote, el veterano arquero salió con todo para ahogar el grito, pero no tuvo descanso: otra vez lo castigaron y logró repeler el ataque con su pie.
Con mucho por jugar, la tónica se emparejó y Racing encontró el 2-1 con un remate de Juan Pablo Rodríguez. El volante se llenó la zurda y puso a ganar a su equipo: el match era electrizante. Pero poco duró la alegría, porque otra vez el árbitro Pablo Giménez sancionó un penal, esta vez por un toque en la mano de José Aja, que dejó muchas dudas. Arias esta vez no pateó, y Jonathan Candia la mandó a guardar y puso el empate.
Con siete minutos de descuento, porque el partido estuvo detenido por inconvenientes entre los hinchas (que no pasaron a mayores) y Racing con uno menos -Leandro Otormín recibió un fuerte golpe en la cabeza tras un choque con Bava, y su equipo no tenía más cambios-, el partido daba para mucho. Para tanto daba, que Junior Arias se sacó la rabia con un tremendo gol de volea que fue inatajable para Contreras. Así, Liverpool ganó en la hora y sumó 6 enormes puntos que son importantísimos en su afán de escaparle al descenso.