Un intercambio de declaraciones entre las diputadas Elisa Carrió y Margarita Stolbizer sirvió para exponer un proyecto que debate el Congreso argentino para donar alimentos a punto de vencerse sin que el donante tenga ninguna responsabilidad por los daños que puedan causar.

Existe en ese país una ley de donación de alimentos, la 25.989, que se aprobó en 2004 y establece quiénes pueden donar, qué y de qué manera. Pero algunas organizaciones que trabajan con donaciones de alimentos reclaman que la norma cambie. Una de ellas es la Red Argentina de Bancos de Alimentos, que reúne a 16 bancos en todo el país y que el año pasado repartió casi nueve millones de kilos de comida. La directora ejecutiva de esta red, Natascha Hinsch, expuso estos reclamos en una entrevista con el diario argentino La Nación. Los principales surgieron en 2005, cuando se vetó el artículo 9º de la ley aprobada un año antes, en el que se eximía al donante “de la responsabilidad sobre los alimentos una vez entregados a los beneficiarios bajo las condiciones exigidas por el Código Alimentario Argentino”, que son las mismas que debe cumplir un producto para ser comercializado. Hinsch consideró que el veto desestimula esas donaciones.

El proyecto que ahora discute el Congreso fue elaborado por su organización y presentado al Congreso por la diputada Patricia Giménez, de la Unión Cívica Radical, integrante de la alianza gobernante Cambiemos. El texto no sólo restablece el artículo 9º, que permite al donante desentenderse de los efectos que causen los alimentos que entregó, sino que también propone una serie de beneficios, sobre todo fiscales, para las empresas que donen a los bancos de alimentos y a otras organizaciones.

La iniciativa llegó al plenario de la cámara baja el miércoles, día en que generó un fuerte cruce entre Stolbizer y Carrió para luego ser enviado nuevamente a estudio de una comisión parlamentaria.

Stolbizer, diputada opositora, criticó que con esta ley se asuma que lo que se dona es lo que está a punto de ser un desperdicio y agregó que “no se resuelve el problema del hambre con lo que sobra”.

Las palabras de Stolbizer molestaron a Carrió, oficialista, que dijo que existe “un progresismo estúpido que cree que es preferible que [las personas que lo necesiten] vayan a buscar a la bolsa de basura en vez de tener los alimentos en su casa”, y criticó que se trate a los bancos de alimentos como si fueran empresas cuando son organizaciones civiles.

En esa intervención que molestó a Carrió, la diputada Stolbizer dijo que lo que propone el proyecto “es gravísimo” y consideró que “es incorrecto pretender que el que dona un alimento no es responsable del daño si ese alimento, por una cuestión de vencimiento, termina matando a un chiquito”. A su entender, lo propuesto “es terriblemente antiético”.