La Comisión Electoral de Rusia rechazó la candidatura de Alexéi Navalny para las elecciones presidenciales de marzo, en las que enfrentaría al actual presidente, Vladimir Putin. El organismo ya había advertido a Navalny que rechazaría su solicitud de participar en las elecciones porque tiene antecedentes penales. En febrero, Navalny fue condenado a cinco años de prisión y diez de inhabilitación por apropiación indebida. La condena fue calificada de injusta por el Tribunal Europeo, mientras él y sus seguidores denunciaron que se trata de persecución política. La Justicia rusa dispuso que la pena de prisión para Navalny quedara en suspenso, pero su inhabilitación se mantiene.

Antes de que esta decisión se conociera, durante el fin de semana, se realizaron reuniones en 20 ciudades para proponer a Navalny como candidato independiente. El siguiente paso era la presentación de 30.000 firmas que el político todavía no había empezado a reunir.

“No habrá elecciones. Putin está muy asustado. Teme enfrentarse a mí. Me ve como una amenaza. Ha ordenado a sus siervos de la Comisión Electoral que me nieguen el registro”, dijo Navalny después de que el órgano anunciara su dictamen. El opositor llamó a una “huelga de votantes” el 18 de marzo, con el argumento de que no se tratará de una elección real, sino de una votación en la que sólo “participarán Putin y aquellos candidatos elegidos personalmente por él”. Dijo, además, que el grupo de oposición extraparlamentaria que él representa “no reconocerá ni los resultados de los comicios ni a las autoridades resultantes”. Por último, anunció que recurrirá la decisión de la Comisión Electoral ante el Tribunal Constitucional, “a pesar de ser consciente de que es parte de un mismo sistema” que, dijo, obedece los dictámenes de Putin.

Entre quienes respaldan a Navalny está Ksenia Sobchak, una actriz y presentadora de televisión de 36 años conocida como “la Paris Hilton rusa”, que fue postulada formalmente como candidata este fin de semana. Cuando lanzó su candidatura, en octubre, Sobchak dijo que se retiraría si Navalny era habilitado para participar en las elecciones.

En todo caso, de acuerdo con los analistas rusos, Putin tiene prácticamente garantizada su victoria el 18 de marzo. Durante el fin de semana cinco partidos hicieron sus congresos y declararon su apoyo a la candidatura del mandatario, entre ellos el oficialista Rusia Unida, la organización política que Putin lideró hasta 2012, y la socialdemócrata Rusia Justa. El presidente de Rusia Unida y primer ministro del país, Dmitri Medvedev, fue el responsable de anunciar la decisión: “Este año el partido cumplió 16 años y todo este tiempo ha tenido sólo un líder indiscutible que unifica Rusia, que cuenta con la confianza y el respaldo de la mayoría absoluta de nuestros ciudadanos: Vladimir Vladimirovich Putin”.

Desde hacía meses se daba por descontado que Putin participaría en las elecciones presidenciales, pero el mandatario recién lo confirmó a comienzos de diciembre. La novedad radicó en que el presidente anunció que se presentará como candidato independiente, aunque manifestó su “confianza” en que contará con el respaldo de varias fuerzas políticas, como las que ya anunciaron su apoyo.

En el congreso federal de Rusia Unida, Medvedev dijo que el partido comparte la decisión de Putin de presentarse como candidato independiente, porque “debe apoyarse en las masas populares, al margen de los partidos”.