Real Madrid se clasificó a la final de la Champions League a pesar de que ayer perdió 2-1 con Atlético de Madrid en el partido de vuelta de esta llave semifinal, en el estadio Vicente Calderón.
La goleada 3-0 del primer partido de la serie fue determinante para sellar el pasaje al encuentro definitorio. A pesar de que ayer los colchoneros se ilusionaron con la hazaña por los tantos tempraneros anotados por Saúl Ñíguez y el francés Antoine Griezmann, de penal, a los 12 y 16 minutos, respectivamente, el descuento madridista, convertido por Isco a los 42, pinchó definitivamente la posibilidad de hazaña. El segundo tiempo del partido sobró, entre las ganas de ir de los locales y la tranquilidad de los merengues.
Diego Godín en la zaga y José María Giménez en el lateral derecho fueron titulares en Atlético, que ahora, en lo poco que queda de temporada, únicamente tendrá como objetivo mantener el tercer puesto de la Liga. Por otra parte, el de ayer pasará a la historia por haber sido el último clásico madrileño que se disputó en el Vicente Calderón, debido a que Atlético se mudará a su nuevo escenario, el Estadio Metropolitano de Madrid -por razones de patrocinio, su nombre oficial será Wanda Metropolitano-, que será inaugurado en el segundo semestre de este año. El Calderón, inaugurado en 1966, será demolido el año que viene y en su predio se construirán viviendas y un parque.
Para Real Madrid la final que jugará con los italianos de Juventus en Cardiff el sábado 3 de junio será la número 15 en su profuso historial en la máxima competición europea. Los blancos, que son los actuales monarcas del torneo, fueron campeones en 11 ocasiones: por lejos, son el club más galardonado de Europa. Segundo en el historial, con siete títulos, está el Milan italiano.
Pero además de haber ganado 11 finales, los merengues perdieron en el partido definitorio en otras tres ocasiones, en 1962 con Benfica de Portugal, en 1964 con Inter de Italia y en 1981 con Liverpool de Inglaterra.
Los rivales de la final de Cardiff ya se enfrentaron una vez en esta misma instancia en 1998. En aquella ocasión, en Ámsterdam, los españoles se quedaron con el título al ganar 1-0 con un gol del montenegrino Predrag Mijatovic.