Nacional, Racing y Wanderers están primeros en la serie B, luego de la segunda fecha del Torneo Intermedio. Los tricolores mantienen su buen paso en este segundo torneo de la temporada y el sábado derrotaron 2-1 a Danubio. Fue el primer partido que se celebró bajo la nueva denominación del escenario danubiano, llamado ahora oficialmente Estadio Jardines del Hipódromo María Mincheff de Lazaroff, en honor a la mujer que le dio nombre a la institución, madre de dos de los gurises que fundaron el club en 1932. Como había pasado hace casi 60 años en la inauguración de la cancha danubiana –el 25 de agosto de 1957–, los rivales en la ocasión festiva de los locales fueron los tricolores, que al igual que en aquella ocasión se volvieron a quedar con el triunfo.
El equipo de Martín Lasarte se llevó tres puntos de una cancha en la que en los últimos tiempos no le había ido bien. Aunque no la pasó bien durante algunos pasajes del partido, terminó celebrando una victoria que lo dejó en la cima de la Tabla Anual. Rodrigo Aguirre, autor del primer gol, fue el jugador más influyente del partido actuando como cabeza del ataque, por delante de los tres mediapuntas Tabaré Viudez, Martín Ligüera y Sebastián Fernández. Su tanto llegó a los 31 minutos, gracias a un toque con la punta del zapato izquierdo luego de un anticipo para recibir un afilado centro desde la derecha de Tabaré Viudez. Ese gol marcó un duelo en el que hasta ese momento los danubianos habían tenido la mayor parte del dominio de las acciones. Pero así como tuvieron la pelota, esos minutos de predominio confirmaron la falta de peso ofensivo de los franjeados, defecto que se siguió viendo durante el resto del juego. Con el gol Nacional se soltó. Empezó a jugar en la cancha ajena y casi enseguida llegó al 2-0, debido a un penal convertido por Sebastián Fernández a los 37 minutos. Una mano de Agustín Peña, tras un centro de Alfonso Espino, fue bien sancionada por el árbitro Leodán González; así, los tricolores sacaron dos goles de ventaja rápidamente, en un partido que estaba apretado.
Danubio se adelantó en el segundo tiempo, en el que sus laterales Agustín Peña y Lucas Olaza jugaron casi como volantes ofensivos. Nacional, por su parte, se paró bien atrás, manteniendo el peligro alejado del arco, defendido de buena manera por el panameño Luis Mejía. El volante Ignacio González era otro jugador muy activo en la ofensiva danubiana, pero el autor del gol del descuento fue el panameño Abdiel Arroyo, que mandó la bola a la red con un zurdazo tras un centro que había quedado boyando en el área de Nacional.
El 2-1 calentó la tarde, aun con el marco de frialdad que daban las tribunas mayoritariamente despobladas de Jardines. Entonado, Danubio se fue arriba, pero más allá de un tiro de Ignacio González que atajó muy bien Mejía, no ofendió el arco rival. En esto tuvo mucho que ver el desempeño defensivo de Rafael García –que tras varios partidos de bajo rendimiento volvió a jugar bien–, pero también de Diego Arismendi, puntal de este equipo de Lasarte. El intenso trabajo de los defensas y volantes de Nacional pudo cortar los intentos de avance de los dirigidos por Gastón Machado, que tienen en la falta de gol a uno de sus acompañantes más fieles en esta temporada.
También fue importante en el cierre del partido el trabajo de Rodrigo Aguirre, que con su velocidad fue siempre una presencia inquietante para los zagueros danubianos. Dos desbordes suyos ambientaron claras chances de gol de Sebastián Fernández y Hugo Silveira, que fueron notablemente controladas por el arquero Salvador Ichazo, pero el 3-1 que nunca llegó estiró la incertidumbre hasta el final.