Año a año, temporada a temporada, las finales de los torneos del fútbol femenino del interior uruguayo van tejiendo historias diversas. Algunas definiciones estuvieron cantadas, otras son verdaderas sorpresas y esta fue una de ellas. Hasta el último tiro penal, ya que a ellos hubo que acudir. Atlético Valdense, institución muy fuerte del departamento de Colonia con mucha historia en la Liga Helvética del fútbol masculino, fue un caso excepcional en su tercera incursión nacional en torneos femeninos: trepó hacia la final de forma casi inadvertida, no sin tropiezos importantes, pero nunca desfalleció, nunca se dio por vencido y, al final, metiendo y metiendo, siempre respondón y rebelde, hizo suya una contienda final ante un cuadro mucho más experimentado, más baqueteado, el Nacional floridense, que sólo pudo ser derrotado en el último tiro desde el punto penal de la tanda de cinco ejecutados, justo cuando la lluvia comenzó a arreciar en el final de la tarde del sábado en el estadio Campeones Olímpicos de Florida.
Los nombres del Atlético Valdense en la segunda final de la Copa Nacional de Clubes del Interior fueron los mismos que salieron a la cancha al inicio del partido de ida: Karen Pérez; Valeria Rodas, Florencia Bonilla (14 años), Ana Fischer y Sofía Waller (16); Gimena Vila, Carolina Begle y Natalia Vinkler; Caryna Queiroz, Micaela Suhr (15) y Agustina Viera (16).
En el tanteador el partido fue el inverso al jugado una semana antes en Nueva Helvecia. Esta vez empezó ganando Valdense a los 16 minutos con la conquista de Caryna Queiroz. De ahí en más, acentuó su juego, de por sí defensivamente cerrado. El empate para Nacional lo obtuvo, con calidad, Romina Alanís, a los 65 minutos. Luego derivaron hacia la igualdad final y ¡a tirar penales!
El siguiente fue ese transcurrir emotivo volcado a nombres y circunstancias, imposible de contar en su real intensidad, en su vivencia conmocionante. El último penal, rematado por Micaela Suhr, valió la consagración y desató el lógico festejo de las ganadoras.
Las locales, con profunda desazón, después de la reflexión y del duelo respectivo, serán muy conscientes de que hicieron un gran campeonato con una actuación destacadísima. Ahora, a preparar la próxima, la de 2018.