Por primera vez en cuatro décadas, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) fue desplazado del gobierno de Andalucía, y esta comunidad autónoma española será gobernada por la derecha. Un parlamento regional en el que el Partido Popular (PP), Ciudadanos y Vox acumulan la mayoría elegirá a mediados de enero al titular del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, como presidente de la Junta, el Poder Ejecutivo de esa comunidad autónoma de España.

La diputada de Ciudadanos Marta Bosquet fue elegida este jueves presidenta del Parlamento andaluz. Se trata de la primera vez que su partido llega a presidir una institución autonómica. Bosquet fue elegida con 59 de los 109 votos, con el respaldo de Ciudadanos, el PP y el ultraderechista Vox, que a la vez estrena representación parlamentaria.

La coalición de izquierda Adelante Andalucía (formada por Podemos e Izquierda Unida) postuló como candidata a la presidencia del Parlamento a la diputada Inmaculada Nieto, quien contó además con el respaldo del PSOE y quedó a nueve votos de distancia de Bosquet. Los socialistas, que fueron desbancados del poder después de 16 mandatos ininterrumpidos en Andalucía, no presentaron candidatura porque ya daban la batalla por perdida.

El gran derrotado de este miércoles, sin embargo, no fue el PSOE sino Adelante Andalucía, que se quedó afuera de la Mesa del Parlamento, el órgano colegiado que suele definir qué proyectos son aceptados para tramitarlos. La Mesa quedó integrada por dos integrantes del PP, dos del PSOE, uno de Ciudadanos y otro de Vox. La derecha y la extrema derecha se quedó entonces con cinco puestos –incluida la presidencia del Parlamento– y la izquierda suma sólo dos representantes.

Cuando terminó la votación, y antes de que Bosquet y los nuevos miembros del Parlamento tomaran posesión de los cargos, el portavoz de Adelante Andalucía, Antonio Maíllo, recordó que la coalición de izquierda fue más votada que Vox en las elecciones autonómicas y denunció que la composición de la Mesa va contra el reglamento de ese órgano legislativo. “Solicito que se aplique el artículo 36 del Parlamento, que dice que ‘todos los partidos, federaciones y coaliciones que, habiendo concurrido a las anteriores elecciones, hubieran obtenido [...] representación suficiente para constituir grupo parlamentario, tendrán derecho a estar presentes en la mesa’. El grupo parlamentario de Adelante Andalucía no se encuentra ahora mismo entre los miembros de esa mesa”, dijo Maíllo a la socialista Marisa Bustinduy, quien dirigió la sesión por ser la diputada con mayor edad.

El vocero dijo que la coalición queda en “profundo desamparo” y le reprochó a Bustinduy que haya vulnerado “la pluralidad de la Cámara” y dejado “sin representación a los 600.000 andaluces” que la votaron. A pesar de que el artículo 36 del reglamento del Parlamento establece que todas las bancadas tienen derecho a estar representados en la Mesa, este punto quedó invalidado en el mandato anterior por dos sentencias del Tribunal Constitucional. Bustinduy recordó este antecedente y Maíllo anunció que recurrirá la decisión ante la Justicia. El portavoz del PSOE, Mario Jiménez, fue el único en respaldar al dirigente izquierdista: dijo que la composición actual de la Mesa no representa la proporción de fuerzas del órgano legislativo y apeló al “respeto a la pluralidad”.

Si bien es seguro que Moreno se convertirá en el próximo presidente andaluz, todavía falta que PP y Ciudadanos cedan a algunas exigencias planteadas por Vox. Las negociaciones sobre cuestiones programáticas ya están en marcha, aseguró este jueves el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith. El ultraderechista también afirmó que sus dos aliados ofrecieron a Vox el liderazgo de algunos ministerios pero que la propuesta fue rechazada porque, al estar “en minoría” en el gobierno, el partido no iba a poder adoptar “la mayoría de las medidas que son necesarias para Andalucía”.

El presidente del PP en el plano nacional, Pablo Casado, se mostró “muy satisfecho” por los resultados en el Parlamento andaluz, y dijo que constituyen “un preámbulo de lo que va a pasar en las elecciones autonómicas y municipales” previstas para mayo de 2019. “Si hay un acuerdo entre los constitucionalistas en Andalucía, ¿por qué no va a haberlo en Navarra y en tantas autonomías, ciudades y provincias de España que lo que quieren es tener mejores políticas y, sobre todo, un partido al frente que respete la creación de empleo, la unidad de España y nuestro prestigio internacional?”, dijo el dirigente en un acto en Pamplona.