La organización Abuelas de Plaza de Mayo dio ayer una conferencia para manifestar su repudio al intento de otorgar el beneficio de la prisión domiciliaria a 96 condenados por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura argentina. También denunció lo que esto implica para el nieto Guillermo Pérez Roisinblit, que nació en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) y fue recuperado en el año 2000.

La semana pasada se conoció por la prensa la lista de represores que podrían obtener el beneficio de la prisión domiciliaria. El documento fue diseñado por el Sistema Penitenciario Federal y le sugiere a la Justicia que evalúe la posibilidad de que cumplan sus condenas en sus casas con el argumento de que es necesario reducir la superpoblación carcelaria. La lista generó repudio en organizaciones vinculadas con los derechos humanos, particularmente cuando Pérez Roisinblit –nieto de la vicepresidenta de Abuelas, Rosa Roisinblit– denunció que allí figura su apropiador, el ex agente de la Fuerza Aérea Francisco Gómez, que fue condenado a 12 años de prisión el año pasado.

Roisinblit ha pedido por todos los medios que Gómez no obtenga el beneficio, y denunció que lo amenazó de muerte. El sábado contó en Twitter que la última vez que vio a Gómez él le dijo: “Algún día voy a salir, y ese día les voy a poner una bala en la frente a vos, a tu hermana y a tus abuelas”. En la red social agregó: “No quiero que salga, estoy seguro de que va a querer cumplir su promesa, sé lo violento que es”. Además, Roisinblit anunció en una entrevista con la radio La Red que recurrirá a la Justicia. “La ley de víctimas obliga al Poder Judicial a notificar a las víctimas para que puedan ser oídas previo a la toma de decisión de un tribunal o un juez. Estoy pidiendo hacer uso de ese derecho”, dijo.

Ayer, en la conferencia de prensa, su abuela, Rosa, consideró que “aquel que cometió un delito tiene que cumplir con su condena” sin importar su edad. Por su parte, la presidenta de Abuelas, Estela de Carlotto, lamentó que sea necesario hacer reclamos para “proteger a nuestros nietos y nietas y para protegernos”.

Después de la conferencia, Abuelas emitió un comunicado en el que condena la posibilidad de que se siga otorgando prisión domiciliaria a represores. “La sensación de indefensión que padecen nietas y nietos restituidos se reitera cada vez que quienes cometieron el delito de apropiarlos, secuestrarlos y asesinar a sus padres cuentan con el beneficio de volver a sus casas”, indica el texto. Agrega que la iniciativa del Sistema Penitenciario Federal no tiene nada “que ver con el intento de resolver la problemática de superpoblación carcelaria”, sino que refleja “los retrocesos en materia de memoria, verdad y justicia impartidos desde el gobierno nacional”.