Cientos de trabajadores rurales se movilizaron en Asunción para reclamar la reforma agraria. La Federación Nacional Campesina (FNC), la más grande de este sector en Paraguay, convocó para el miércoles y el jueves la 25ª Marcha del Campesinado Pobre, su mayor movilización del año en Asunción. En esa protesta se reclamó al gobierno la aprobación e implementación de una reforma agraria para entregar tierras del interior del país a los campesinos que tienen menos recursos.
Muchas de esas tierras están ociosas o fueron apropiadas de forma ilegítima por grandes productores rurales. De acuerdo con la organización Oxfam, 90% de las tierras de Paraguay está en manos de 5% de los propietarios, la mayoría de los cuales son extranjeros.
Los campesinos consideran que ningún partido político los representa, y subrayaron que ninguno de los candidatos lleva la reforma agraria en su programa, por lo que decidieron no respaldar a ninguno de los participantes de las elecciones del 22 de abril. La FNC llamó a votar anulado para demostrar que los campesinos decidieron “abandonar a los politiqueros”, dijo a la agencia de noticias Efe el secretario general adjunto de la organización, Marcial Gómez.
“En las elecciones vamos a votar protestando”, dijo Gómez en el acto central de la marcha, en el que llamó a invalidar el voto escribiendo en la papeleta frases como “voto por la reforma agraria”, “voto por la salud” o “voto por la educación”. Agregó: “De esta manera expresamos nuestra rabia y rechazo a los candidatos, porque ninguno de ellos ofrece realmente políticas o programas que beneficien a nuestro pueblo”.
La FNC también abogó por la creación de un “poder popular” que los represente y vehiculice sus reclamos ante el sistema político. En este sentido, Gómez aseguró: “Todas las conquistas que tendremos se lograrán por medio de la lucha y no de la voluntad política del gobierno”.