Omarosa Manigault Newman, una ex participante del reality show El aprendiz, conducido por el ahora presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lo acusó de usar varias veces la palabra nigger, un término particularmente despectivo para referirse a los negros. Manigault, quien también trabajó como asesora de la Casa Blanca, confesó que no divulgó esta información porque “si después de haber dicho que a las mujeres había que agarrarlas por la vagina siguió creciendo en las encuestas, cuando la gente se enterara de esto iba a despegarse completamente”. En efecto, luego de que se divulgaran las denuncias de la ex concursante, la popularidad de Trump tuvo un importante repunte. Un analista político de la Universidad de Stanford explicó que “los tuits del presidente, por más incendiarios que sean, no cruzan ciertos límites. Y en todo caso, muchas veces son seguidos por una disculpa. Pero cada vez que sale un libro que revela episodios pasados de racismo, sexismo o xenofobia, su base de electores recuerda cómo era antes de llegar a la Casa Blanca y por qué lo votó”. En las últimas semanas Trump lanzó una serie de tuits en los que cuestionaba el coeficiente intelectual de varios periodistas y deportistas negros. De todas maneras, sus asesores niegan que el racismo esté detrás de estos mensajes. “Lo que pasa es que el presidente descubrió hace poco que existía una cosa llamada coeficiente intelectual, y lo usa todo el tiempo porque su coeficiente intelectual no es bajo, sino infantil”.