El sábado, la lista 66 de Alianza Nacional, del Partido Nacional (PN), llevó adelante su octavo congreso, al que asistió el precandidato y senador Jorge Larrañaga. En su discurso, dijo que el PN tiene que entender que, si gana las elecciones, va a tener que acordar con otros partidos, porque no va a tener mayorías parlamentarias. Recordó que hace ocho meses presentó en el Directorio de su partido la “Agenda para el progreso”, un texto que pretende ser un documento programático para negociar con otras fuerzas políticas. “Que lo repartan”, pidió el sábado. “Busquemos entendimientos y no lo dejemos para el último tiempo”, dijo, y argumentó que si se hace al final de la carrera electoral, los entendimientos serán vistos como “acuerditos políticos” y la gente sospechará que son “reparto de cargos”.

En el acto, la lista –que lidera el diputado Pablo Abdala– entregó 10.000 firmas para la reforma de la Constitución que propone Larrañaga. Sobre la seguridad, Larrañaga aseguró que Uruguay “no tolera más el quiebre de la convivencia pacífica, no puede aceptar más la falta de respeto, la falta de autoridad y la falta de orden”. Admitió que el cambio en la Constitución “no es mágico”, pero sí “un cambio en la línea de cómo combatir la delincuencia”. Dijo que el plebiscito es una manera de que la sociedad busque caminos: “Por algo está aquello que decía John Fitzgerald Kennedy: no esperemos todo de arriba, preguntemos qué podemos hacer como ciudadanos por el país y por la sociedad”.

Para el nacionalista, “se necesitarán políticas sociales para que los pobres y los marginados puedan salir de la pobreza, asciendan de categoría y no sigan en una noria sin fin”.