Como es habitual cada 17 de octubre, los peronistas celebran hoy el Día de la Lealtad, en recuerdo de los hechos acontecidos en esa fecha en 1945, cuando una multitud compuesta mayormente por obreros marchó sobre el centro de Buenos Aires reclamando la liberación del entonces coronel Juan Domingo Perón, quien se encontraba encarcelado en la isla Martín García luego de una disputa interna dentro del gobierno militar de facto que comandaba Edelmiro Farrell.

En este caso, la celebración coincide con la recta final de la campaña electoral para los comicios que se realizarán el 27 de octubre y es por ello que la fórmula de Frente de Todos, que conforman Alberto y Cristina Fernández, protagonizará esta tarde un acto en la ciudad de Santa Rosa, capital de la provincia de La Pampa.

“Uno es peronista porque tiene la obsesión de que quienes no tienen voz tengan voz. De que quienes padecen injusticias dejen de padecerlas. De que la igualdad empiece a reinar en la Argentina. Mañana nos vemos en Santa Rosa. #DíaDeLaLealtad. #ArgentinaDePie”, escribió ayer en su cuenta de Twitter Alberto Fernández, a quien todas las encuestas dan como claro favorito para las elecciones que se celebrarán dentro de diez días.

En el acto –uno de los pocos de la campaña en los que estarán los dos integrantes de fórmula de Frente de Todos– participarán además los principales dirigentes peronistas y también varios gobernadores provinciales pertenecientes al Partido Justicialista.

Por su parte el actual presidente y candidato a la reelección, Mauricio Macri, continúa con su campaña bajo el lema “Sí, se puede” y en ese marco ayer recorrió varias localidades de la provincia de Córdoba, el único distrito del país en el que el oficialismo fue mayoría en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias celebradas el 11 de agosto.

Allí, según recogió el portal Infobae, el mandatario aseguró que la del 27 de octubre no es una elección más, y reconoció que la inflación “es un flagelo” que afecta al país “desde hace 80 años”. Asimismo, insistió en que “el mundo se asustó el 12 de agosto porque pensó que Argentina iba a volver al pasado”, pero advirtió que eso sucedió “porque no conocen a los argentinos”, y afirmó que “amagan un poco, pero al pasado no se vuelve”. Macri le aseguró a su auditorio que si hay un nuevo mandato de Cambiemos vendrá “el alivio para la clase media”, aunque reconoció “el agobio y la angustia” de los argentinos “a los que les cuesta llegar a fin de mes”. Además, Macri volvió a hacer referencia a los señalamientos con el dedo índice que le hizo Alberto Fernández en varias ocasiones durante el primer debate entre candidatos realizado el domingo en la ciudad de Santa Fe.

“Los argentinos no quieren más a los prepotentes que se creen los dueños del poder; no queremos más deditos que nos disciplinen”, recalcó Macri, que le pidió al público cordobés que lo acompañe en el acto que el oficialismo hará en el centro de Buenos Aires el sábado, un día antes del segundo debate presidencial que tendrá lugar el domingo en la Facultad de Derecho de la capital argentina. “Los espero a todos en el Obelisco, por nuestro futuro”, arengó Macri.