El lunes 20 de setiembre la Justicia archivó el caso contra el vocero de Rebeldía Organizada, Richard Mariani, que había sido denunciado por difamación e injurias por el ex jefe de seguridad de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) Miguel Zuluaga.

En mayo del año pasado, antes del mundial de Rusia, 30 organizaciones sociales, entre ellas Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos y Rebeldía Organizada, impulsaron la campaña “Hagámosle un gol a la impunidad. Fuera Zuluaga de nuestra selección”. Zuluaga, que había formado parte de la Dirección Nacional de Información e Inteligencia (DNII) en dictadura, fue desafectado de su cargo.

“Quedó demostrado que lo que nosotros manejamos era de dominio público, y Zuluaga también es una persona pública, y un represor, dijo Mariani a la diaria.

En un comunicado, Rebeldía Organizada asegura que “como viene siendo habitual en las estrategias de los represores de la dictadura, Zuluaga intentó posteriormente una ofensiva judicial dirigida contra las organizaciones”.

Mariani destacó que lo que él hizo fue citar información que ya había sido publicada. En el comunicado se especifica que durante este juicio hubo “testimonios de ex presos de la dictadura que se encontraban detenidos en la DNII durante el período en que Zuluaga operó allí, llegando a ser sub-comisario; Diego Damián Luis Libschitz y Ruben Waisrub contaron con lujo de detalle el horror de lo ocurrido en la DNII”.

En el final del texto la organización llama a continuar con la campaña, y “con la condena social”, “con la recopilación de testimonios y documentación hasta que se quiebre la impunidad y se logre justicia”.