Los conflictos bélicos siempre generan desplazamientos, y en la huida la mayoría toma lo que puede mientras se embarca en busca de nuevos horizontes. Esta historia comienza con la salida de Gustav Brunn de la Alemania nazi hacia Estados Unidos. Sus pertenencias, igual que muchos inmigrantes, eran escasas, pero entre ellas contaba con una lata de especias y un molinillo, que fueron los que le abrirían puertas, logrando forjar una compañía que todavía perdura.

Llegó al nuevo mundo en la línea de barcos Old Bay, se instaló en la bahía de Chesapeake, en el estado de Maryland, y desde entonces vio el potencial de la industria pesquera, que abastecía de frutos de mar y carne de cangrejo a los restaurantes locales.

Los productos eran tan frescos y deliciosos que casi no precisaban condimentarse, pero él quiso que fuera optativo añadir un sabor extra al plato. Gracias al modesto botín en su valija nació el sazonador Old Bay, en homenaje al buque que lo llevó hasta allí. Lleva ingredientes como sal de apio, nuez moscada, paprika, pimienta, clavo, cardamomo y azúcar. Al menos así salió al mercado en 1939. Su popularidad inmediata se debió a que era fácil de aplicar en frutos de mar recién cocidos o en la propia cacerola, realzando langostas, cangrejos, gambas y camarones. Con el paso del tiempo la mezcla se hizo tan adictiva que se la aplicaba a papas y pollos fritos, ensaladas, sopas y hasta pop. Su fama se extendió a otras ciudades costeras y comenzó a variar, pero una vez registrados su receta y nombre sólo se pudo llamar Old Bay al original de Brunn. En la década del 90 una de las empresas alimentarias más importantes del mundo compró la patente y hoy en día en Estados Unidos se comercializa bajo la marca McCormick.

Tan simple como para tener en un salero, este condimento va bien en mejillones recién cocidos, camarones, pescado empanado o a la plancha, rabas para freír, pejerrey frito o al horno de barro, pollo frito.

Camarones con Old Bay

Ingredientes | ½ kilo de camarones tigre con cola. 1 cucharada de Old Bay. 1 taza de harina. ½ taza de maicena. Agua (cantidad necesaria). Aceite para freír.

Procedimiento | Lavamos los camarones y les dejamos la cola para poder agarrarlos. En un bol colocamos la harina y la maicena junto con el Old Bay, agregamos agua hasta lograr una pasta ligera estilo buñuelo. Colocamos aceite a calentar en la sartén y una vez listo vamos a freír. Pasamos de a uno los camarones por la mezcla y colocamos en aceite caliente. Apenas dorados, los retiramos y los dejamos escurrir en rejilla. Si deseamos, podemos colocar más Old Bay al momento de servir o preparar una mayonesa para acompañar. Como variante, podemos utilizar pescado en lugar de camarones, o coliflores en caso de una versión vegetariana. Otra opción es saltear los camarones con la cola en aceite de oliva y al momento de servir aderezar con Old Bay.


Subasta a beneficio

Mañana la Fundación Canguro volverá a subastar experiencias donadas por figuras de diferentes áreas, como la danza, el deporte y la música, durante una cena que se llevará a cabo en el hotel Sofitel Montevideo Casino Carrasco a las 20.30. La intención es recaudar fondos que serán destinados a la adquisición de equipamiento para la sala Canguro, donde funciona la ONG, ubicada en el centro hospitalario Pereira Rossell. Bajo la consigna “levanta tu mano por nuestros bebés”, la velada solidaria permitirá a los asistentes, además de disfrutar la propuesta culinaria, asistir a talleres de cocina criolla con Hugo Soca, tener un meet & greet con La Vela Puerca en el show del Luna Park, mantener encuentros sorpresa con Meri Deal o conocer las artes marciales mixtas de la mano de Gastón Reyno. Los tickets cuestan 100 dólares y para adquirirlos hay que enviar un correo a [email protected] o comunicarse al 099130705.

Cata en Teluria

La vinoteca que está en el subsuelo de la librería Puro Verso, con ingreso por la calle Cuareim 1359, ofrecerá hoy la segunda instancia de cata de vinos oceánicos, con caldos de Alto de la Ballena y Cerro del toro. Se degustarán tres vinos de cada bodega acompañados del siguiente menú de Liliana Spinatelli: montadito de palta y camarón con coulis de mango, empanada gallega con mix de verdes, rolls de berenjena con pesto de tomates secos, tortilla de papas con escalivada, fatay de cordero y mousse de chocolate. Cuesta 900 pesos y toman reservas al 092736115.

Comida callejera en Punta Carretas

Mañana Cuatroveinte Small Bar estrena su ciclo de comida callejera con platos rápidos y especialmente pensados para la ocasión. La movida, musicalizada por un invitado sorpresa, será desde las 20.30 en Guipúzcoa 420.