La Fuerza Aérea de Chile (FACh) declaró esta madrugada como “siniestrado” al avión C130 Hércules que desapareció ayer, con 38 personas a bordo, rumbo a la Antártida, tras más de siete horas de autonomía de vuelo que tenía por carga de combustible, sin que se haya podido retomar el contacto radial.

Según informó la agencia Efe, la aeronave, que despegó a las 16.55 de la Base Aérea Chabunco de Punta Arenas, se dirigía a la base antártica chilena Presidente Eduardo Frei Montalva, donde debía aterrizar a las 19.17, y tenía una carga de combustible como para volar hasta las 00:40 hora local del martes.

El contacto radial se perdió a las 18.13 de ayer, cuando el avión se encontraba a 700 km de Punta Arenas y a 500 km de su destino, dijo en conferencia de prensa el director de operaciones de la FACh, el general Francisco Torres.

“El avión se da por siniestrado porque la autonomía de vuelo se cumplió. A las 00.40 se da por establecido que al avión se le acaba el combustible, por lo tanto este ya no se encuentra volando”, aseguró.

No obstante, Torres no descartó la posibilidad de que el avión haya podido amerizar, ya que se trata de “un procedimiento establecido en todo tipo de aeronaves”. Según agregó, las condiciones meteorológicas eran buenas y están descartadas como causantes del suceso.

Las autoridades ya activaron medios aéreos y marítimos de la Fuerza Aérea y de la Armada para la búsqueda del avión y el potencial rescate de sus pasajeros. Además, la Fuerza Aérea uruguaya también pondrá un Hércules a trabajar en estas tareas.

A bordo del avión viajaban 38 personas, de las cuales 17 son tripulantes de la aeronave y 21 pasajeros.

La tripulación al completo pertenece a la FACh y de entre los pasajeros, 15 son de la FACh, tres son miembros del Ejército y los restantes tres son civiles.

La aeronave trasladaba personal para la revisión de un oleoducto flotante de abastecimiento de combustible de la base antártica chilena para realizar tratamiento anticorrosivo de las instalaciones de la zona.

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, y los ministros de Interior y Defensa, Gonzalo Blumel y Alberto Espina, se dirigieron tras conocer la noticia al puesto de mando de la Base Aérea de Cerrillos, en la capital chilena, para monitorear la situación.

Debido a la situación, Piñera suspendió su visita a la asunción del presidente argentino Alberto Fernández.

El accidente ocurre en una semana difícil para Piñera. Esta semana, el Parlamento de ese país debatirá las acusaciones presentadas tanto contra él como contra su ex ministro del Interior, Andrés Chadwick, por su presunta responsabilidad durante la represión a los disturbios en Chile que comenzaron en octubre de este año.