Renata Almeida de Moura es la jueza del estado de Bahía que dispuso que sea suspendido el recorte en la educación que había ordenado el presidente, Jair Bolsonaro. La medida implicaba que el gobierno central dejaba de entregar 30% de los recursos públicos “no obligatorios” a las universidades federales. Fueron varias las protestas que se hicieron desde su anuncio y, además, el directorio de los estudiantes de la Universidad de Brasilia recurrió ante la Justicia.

La magistrada indicó en su fallo, emitido el viernes, que considera que el recorte de recursos para la educación, “sobre todo cuando se practica en términos porcentuales, no puede prescindir de un estudio técnico y minucioso [...] para garantizar que no interferirá en la continuidad de las actividades académicas”. De lo contrario, agregó que se atentaría contra “las directrices constitucionales en el área de la educación y las prerrogativas de las universidades públicas”.

Además, la jueza repasa en su fallo declaraciones a la prensa del ministro de Educación, Abraham Weintraub, quien dijo que algunas universidades no están llegando al nivel académico esperado porque están utilizando sus recursos para promover “líos” en sus campus. La magistrada indicó que estos argumentos “no son legítimos”.

La decisión judicial puede ser apelada por el gobierno, que todavía no se ha pronunciado sobre este asunto.

Además de estudiantes y docentes, también se pronunciaron contra los recortes ex ministros de Educación de Brasil de gobiernos del Partido de los Trabajadores y del Movimiento Democrático Brasileño. Entre los ex ministros, que firmaron un manifiesto criticando los recortes y la gestión de la cartera desde que comenzó la actual administración, estaba el ex candidato presidencial del Partido de los Trabajadores Fernando Haddad.