En Argentina se conoce como “colectoras” a aquellas listas que reúnen a personas que no son del mismo partido, pero que realizan uniones electorales para hacerse ganar votos mutuamente. Por ejemplo, en 2011, dos candidatos a gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, del Partido Justicialista (PJ), y Martín Sabbatella, de Nuevo Encuentro, llevaron como candidata a presidenta a Cristina Fernández, aunque sólo el primero era de su partido.

En abril de este año, el presidente Mauricio Macri decretó el fin de este mecanismo, a pedido de la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal. En ese entonces, la líder quería evitar que la oposición decidiera unirse en sus listas para evitar su reelección como gobernadora.

Sin embargo, el escenario político electoral cambió bastante desde ese entonces. La popularidad del presidente sigue cayendo, y se teme que eso perjudique las posibilidades de que Vidal gane la reelección. Y la decisión de la ex presidenta Cristina Fernández de ir como precandidata a vice de Alberto Fernández generó un acercamiento entre el PJ y el kirchnerismo, que les permitiría sumar fuerzas. Pero, además, en las elecciones para la provincia de Buenos Aires, el kirchnerismo ya anunció su fórmula, que será compuesta por el ex ministro de Economía Axel Kicillof y la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, que, según las encuestas, reúnen un apoyo superior al 30%. En este nuevo escenario, es la propia Vidal quien podría recurrir a una alianza por medio de las colectoras.

“Si hay otros candidatos a presidente que quieren apoyar a nuestra gobernadora, no nos parece una alquimia”, dijo este lunes el jefe de gabinete, Marcos Peña, en lo que se interpretó como un aval de Macri para que Vidal busque alianzas. La posibilidad que suena con más fuerza, según los medios argentinos, es la de que Vidal negocie ir como candidata a gobernadora de Alternativa Federal, el grupo formado por Sergio Massa, líder del Frente Renovador, y otros sectores peronistas no kirchneristas. De esta forma, especulan, la gobernadora podría contrarrestar el impacto negativo que le genere ser respaldada por Macri.

Cuando se publicó el decreto, el peronismo recurrió a la Justicia, que aún no se ha pronunciado y podría, en última instancia, revocarlo. Si esto no sucede, se abre la posibilidad de que Macri derogue su propio decreto, una opción que Peña pareció confirmar: “Si con eso se consolida una decisión de una mayoría de no volver al kirchnerismo en la provincia”, esta alternativa es viable, dijo.

Tanto Clarín como La Nación se hicieron eco de fuentes vinculadas al gobierno que no quisieron que se diera a conocer su nombre, pero confirman conversaciones de acercamiento entre Vidal y Massa. Pero, mientras que algunos medios informan que hay un acercamiento del massismo con el oficialismo, otros aseguran que está más afín a integrarse al resto del peronismo, que incluiría al kirchnerismo. Por lo pronto, el propio Massa negó públicamente que la primera opción esté cerca de concretarse:

Desde Alternativa Federal, también el gobernador de Salta y precandidato presidencial, Juan Manuel Urtubey, negó que existan contactos con el oficialismo.

“Valoramos con mucho interés la propuesta de Alberto Fernández y de otros dirigentes peronistas de resolver la cuestión de las candidatura en unas PASO [Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias] abiertas que movilizarían el voto opositor con una gran energía política”, dijo a Página 12 un referente cercano a Massa, que pidió no ser identificado. Según ese diario, varios referentes del Frente Renovador redactaron un documento interno en el que le manifiestan a Massa todo su respaldo para buscar “una gran coalición opositora” que permita sacar a Macri del poder, por medio de un acuerdo con coincidencias en el programa de gobierno, las candidaturas y las líneas centrales de la estrategia electoral. Esa información está más en línea con el discurso que pronunció Massa en el Congreso del Frente Renovador y la posición que adoptó la fuerza: allí, el precandidato dijo que quiere “liderar o empujar” una coalición opositora. Además, fue crítico con el oficialismo: “El gobierno es incapaz de ver el dolor y el sufrimiento que está causando” y “Lo peor de todo es que nos sigue diciendo que no hay otro camino” fueron algunas de sus frases.