En una entrevista con la cadena estadounidense CNN, el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Mohammad Yavad Zarif, amenazó con una “guerra total” y con rechazar “hasta al último soldado estadounidense” en caso de que se produzca un ataque procedente de este país o de Arabia Saudita. De todas maneras, Zarif afirmó que Irán espera evitar la confrontación y que incluso su gobierno está dispuesto a dialogar con Arabia Saudita y con Emiratos Árabes Unidos, pero que para eso es fundamental que Washington alivie las sanciones que aplicó a Teherán.

Las declaraciones del jefe de la diplomacia de la nación persa se producen pocos días después de los ataques perpetrados con drones el sábado contra varias refinerías petroleras saudíes. Aunque las acciones de sabotaje fueron reivindicadas por los hutíes –una de las facciones en conflicto en la guerra que se está desarrollando en Yemen–, Washington asegura que Teherán está detrás de los ataques, aunque aún las investigaciones para saber con certeza quien realizó esta incursión no ha concluido.

La destrucción de parte de las refinerías saudíes causó de inmediato un aumento espectacular en el precio del petróleo, al grado de que Estados Unidos se mostró dispuesto a liberar sus propias reservas para contener la escalada. Ante la pregunta de lo que haría Irán ante un ataque militar estadounidense, la respuesta de Zarif fue clara: “guerra total”. “Hago una declaración muy seria sobre la defensa de nuestro país”, agregó el ministro. “Estoy haciendo una declaración muy seria de que no queremos participar en una confrontación militar”, dijo. Sin embargo, no descartó una respuesta militar ante un eventual ataque, algo que tendría como consecuencia “muchas bajas”. “No parpadearemos para defender nuestro territorio”, afirmó el alto funcionario iraní.