Mientras los casos de Covid-19, la enfermedad causada por la nueva cepa de coronavirus, denominada SARS-CoV-2, se acercan a los 200.000 en todo el mundo y las muertes por la pandemia superan las 8.000, Brasil anunció el martes la primera muerte por esta causa, en el estado de San Pablo.

Según informaron las autoridades sanitarias estaduales, se trata de un hombre de 62 años que tenía diabetes e hipertensión, que no había viajado recientemente y que estaba internado desde hacía varios días en un hospital privado de la ciudad de San Pablo, cuyo nombre no fue dado a conocer.

De acuerdo a lo que dijo en una conferencia de prensa David Uip, médico infectólogo a cargo de la coordinación del Centro de Contingencia para el Coronavirus en el Estado de San Pablo, el paciente comenzó a presentar síntomas de la enfermedad el 10 de marzo y fue internado el 14.

El infectólogo informó que están siendo investigadas las causas de otras cuatro muertes ocurridas el mismo martes en otros centros de salud privados de la capital paulista, según informó Folha de São Paulo.

En esta nueva fase de la enfermedad, los técnicos brasileños comenzaron a entender algunas de las dinámicas del virus. Según comentó Uip, ahora se sabe que el período de incubación es más corto de lo que se imaginaba: en promedio, lleva entre tres y cuatro días. “Con esta información, vamos a pedirle al Ministerio de Salud que modifique el criterio de cuarentena, de los 14 días actuales a diez días”, afirmó el infectólogo, que justificó que con esta medida se permitiría mermar el efecto económico que la pandemia está ocasionando.

Paralelamente, en la mañana del martes, luego de haberse hecho un nuevo test para saber si está infectado con el virus, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, afirmó que el coronavirus debe infectar “a cierto número de personas” para que el país quede libre de la dolencia; abona así a la teoría del rebaño, que en principio puso en práctica Reino Unido sumando numerosas críticas dentro y fuera de la isla.

Durante una entrevista radial con la emisora Tupi citada por numerosos medios brasileños, el mandatario ultraderechista afirmó: “Nosotros íbamos a pasar por eso. Lo que está mal es el clima de histeria, como si fuese el fin del mundo. Una nación como Brasil, por ejemplo, sólo estará libre de la enfermedad cuando cierto número de personas esté infectado y cree anticuerpos”.

Con estas declaraciones, el presidente se mantuvo en su línea de subestimar a la enfermedad, al tiempo que los especialistas recomiendan evitar las aglomeraciones y evitar al máximo el contacto social para enfrentar la crisis sanitaria.

Por otra parte, el ex capitán se tomó el tiempo para bromear y asegurar que va a celebrar su cumpleaños número 65 el sábado. “Yo cumplo 65 años en cuatro días y vamos a hacer una pequeña fiesta, como siempre hacemos acá. Además yo cumplo el 21 y mi esposa el 22, así que estos son días de fiesta por acá”, afirmó Bolsonaro, ajeno por completo al clima de incertidumbre que el coronavirus está generando a nivel mundial.

Dichos y hechos

Al tiempo que en Brasil las políticas públicas masivas para evitar la propagación del virus parecen estar libradas a las autoridades de cada estado, el martes en Argentina el presidente Alberto Fernández informó sobre la implementación de nuevas medidas para contrarrestar el virus, que en su país ya contagió a 68 personas y causó dos fallecimientos.

El mandatario afirmó este martes que “el riesgo de los argentinos no puede ser negocio para nadie” y reiteró que será “impiadoso” e “inflexible” contra “un número mínimo de vivos que quieren tomar de bobos a todos los argentinos”.

En los últimos días, ante el temor de desabastecimiento o aumento de precios, se produjeron grandes concentraciones de personas en supermercados minoristas y mayoristas, lo que generó la irritación del líder del Frente de Todos, quien no disimuló en las declaraciones que brindó en la mañana del martes a la radio Metro.

“Cuando se conozcan las medidas económicas van a ver que puse a trabajar a la AFIP, al Ministerio de Trabajo y a Defensa de la Competencia en conjunto para ir contra los especuladores”, anunció Fernández.

El presidente agregó: “Hemos puesto a trabajar a todos en conjunto para ir contra los especuladores, contra los que suben los precios indebidamente, contra los que acumulan mercadería para esperar un mejor precio y venderla más cara. Contra todos voy a ser impiadoso”, aseguró y agregó: “No me digan que uso los recursos del Estado a mi antojo, los voy a usar a favor de la gente. El que especula merece el peor de los castigos sociales; es imperdonable especular con la salud de la gente”.

Según consignó el portal Tiempo Argentino, en sus declaraciones radiales Fernández también se refirió a la repatriación de argentinos en el exterior luego de que se cerraran las fronteras y se cancelaran los vuelos. “Estamos recibiendo 15.000 llamados diarios de argentinos en el exterior”, señaló, al tiempo que les pidió cautela: “Quédense tranquilos que los vamos a ir a buscar”.

Otra medida adoptada el martes por el Ejecutivo argentino fue la suspensión total de la operación de trenes y ómnibus de larga distancia y aviones de cabotaje en todo el país desde el viernes 20 a las 0.00 hasta el miércoles 25 de marzo.

En una conferencia de prensa realizada en la Casa de Gobierno, el ministro de Transporte, Mario Meoni, dijo que lo que se pretende con esta medida es “desalentar los viajes del fin de semana largo”.

“Muchos argentinos no han tomado conciencia de la situación crítica en la que vivimos. Vamos a ser absolutamente estrictos. La Agencia Nacional de Seguridad Vial va a aumentar los controles para desalentar el circuito turístico del fin de semana largo”, agregó el ministro.