La Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH) comenzará a analizar 21 denuncias de abusos policiales que se produjeron a partir del primero de marzo, cuando asumió el nuevo gobierno.
La información fue confirmada por una de las directoras de la INDDHH, la ex magistrada Mariana Mota. “La institución las recibe y estamos trabajando con ellas”, dijo Mota a la diaria, que adelantó que el organismo le solicitará una reunión al ministro del Interior, Jorge Larrañaga.
El futuro encuentro, expresó Mota, buscará “abordar la preocupación” que tiene la INDDHH por los casos. Según dijo, este tipo de reuniones son comunes, y como ejemplo citó que el año pasado hubo un encuentro similar con el ex ministro del Interior Eduardo Bonomi, y el otrora jefe de la Policía Nacional, Mario Layera, tras una manifestación contra UPM ocurrida en Montevideo el año pasado, en la que se produjeron algunos incidentes.
Mota dijo que en el encuentro de la dirección del INDDHH llamó la atención la “alta cantidad” de denuncias por abusos policiales, que es superior a la de todo 2019: el año pasado ocurrieron 15 en todo el año.
Según dijo Mota a la diaria, todavía no se ha definido si la INDDHH abordará de forma conjunta o separada los casos. Eso, explicó, se determinará una vez que se analicen las denuncias.
La reunión entre el PIT-CNT y Larrañaga
Mientras el consejo directivo de la INDDHH analizaba las denuncias de casos de abuso policial, Larrañaga se reunía con el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, y la secretaria general de la Asociación de Obreros y Empleados Municipales (ADEOM), Valeria Ripoll. En el encuentro no sólo se abordaron los recientes operativos policiales que viene llevando a cabo el gobierno desde el 3 de marzo, sino una denuncia concreta de abuso policial realizada el lunes por un funcionario de la Intendencia de Montevideo.
Larrañaga les exhibió un video del momento en el que el funcionario fue revisado y dijo que en función de ese y otro filmado por los propios policías, sostuvo que en el procedimiento no existió ninguna irregularidad. “Ayer hicimos el examen de las cámaras de videovigilancia y hoy hicimos lo mismo con cámaras que portan algunos funcionarios policiales. Ese material lo adjuntamos hoy de tarde a la Fiscalía. De ese relevamiento no hay ninguna irregularidad. El procedimiento fue ajustado de derecho, no coinciden las versiones de prensa con lo que realmente pasó”, dijo el ministro. Horas después la Unidad de Comunicación dio a conocer un video editado de cerca de cuatro minutos de duración sobre lo ocurrido después de la detención del funcionario, en el que no se visualiza ninguna situación de abuso por parte de los funcionarios policiales.
Evitando hacer consideraciones tajantes, tanto Pereira como Ripoll dijeron que en las filmaciones no vieron agresión alguna por parte de la Policía. “Él hablaba de disparos, que no se reportan, aunque tiene una herida en la pierna. El caso está en la órbita policial y el fiscal analizará cada uno de los videos”, dijo Pereira a la diaria. Por su parte Ripoll dijo que se evaluará en un futuro la situación, pero en el video “no se ve todo lo que el compañero ha manifestado”, ya que “se plantean disparos y golpes que no se ven”. El funcionario declaro ayer ante el fiscal Carlos Negro, que pidió los videos completos que posee la cartera para analizar el hecho.
Además, Pereira le planteó a Larrañaga la preocupación de la central sindical por “algunos operativos” considerados “inapropiados”, y que “sobre todo se enfocan en malabaristas o artistas callejeros, personas que no representan ninguna amenaza para un ciudadano”. Pereira sostuvo que a la central le preocupa que exista “una manija social, que se simboliza en la frase ‘se acabo el recreo’, que no debería tener ningún correlato con la acción policial cotidiana”. Según dijo, lo que la central busca es “que no se deteriore la convivencia entre los uruguayos”. El presidente del PIT-CNT sostuvo que Larrañaga les aseguró que la Policía “va a operar de acuerdo al marco legal actual, va a respetar los derechos civiles y en caso contrario se actuará en consecuencia”.
Pereira quedó conforme con la reunión. “Fue una reacción rápida, planteamos la duda el viernes y hoy [por ayer] estuvimos reunidos”.
Operativos contra la pasta base
Larrañaga se había reunido por la mañana con el presidente Luis Lacalle Pou, y tras el encuentro anunció que su ministerio iniciará este miércoles operativos en Montevideo para desarticular con un “combate frontal” las bocas de pasta base.
En esa oportunidad, cuestionó a dirigentes del Frente Amplio por criticar los operativos policiales; la Mesa Política de la coalición de izquierda se había expresado el viernes, condenando los “exabruptos en materia de represión policial”. “Han salido un conjunto de representantes importantes de la oposición a emitir juicios que me parecen aventurados y totalmente fuera de lugar, en donde se pretende colocar a la Policía como que abusa de sus prerrogativas, y eso no lo podemos aceptar”, dijo el ministro, que a la vez defendió que los procedimientos “han sido hechos bajo el amparo de la ley y de la Constitución”.
En tanto, el senador colorado y ex presidente Julio María Sanguinetti respaldó la gestión de Larrañaga y apuntó contra la oposición. En una entrevista con Radio Montecarlo, dijo que “desgraciadamente hay gente en el Frente Amplio que está en una situación de enojo, rencorosa”, y sostuvo que “lo que está ocurriendo con los cuestionamientos a la Policía es algo alarmante”, en un contexto en que la institución que “está acosada hace casi un año, recibiendo la agresión del mundo del delito que pretende que baje los brazos, y atacan y atacan”. Para el ex presidente, “estar hablando de historias menores –que en tal lado la Policía no le habló bien a alguien– es una barbaridad”.
El ex mandatario pidió “respetar y ayudar a la Policía, y no estar en esa situación de ‘qué pasó aquí, qué pasó allá’”. Además, vaticinó que “van a pasar muchas veces procedimientos que no son todo lo felices”, porque es algo “inevitable” y “más cuando estamos con agentes de policía que están actuando bajo esa presión psicológica de que tienen que actuar a veces en forma instantánea”. Si bien sostuvo que los excesos se juzgarán, “como siempre, en lo administrativo o en lo judicial”, “siempre hay que presumir que la Policía está actuando en defensa de la sociedad”.