Una de las principales estrategias del gobierno para combatir la pobreza es el impulso a la actividad privada, en el entendido de que si los empresarios aumentan sus ingresos, toda la sociedad se beneficia. Pero el presidente Luis Lacalle Pou reconoció ayer que esta estrategia “casi no está avanzando”. El mandatario atribuyó este virtual estancamiento “a la falta de solidaridad de muchos empresarios que no hacen todo el esfuerzo que deberían para enriquecerse, y de este modo complican la estrategia de desarrollo del gobierno”. “Me indigna el egoísmo de los malla oro que dejan de pedalear y de acumular riquezas, perjudicando a todo el pelotón. Como presidente, pero sobre todo como uruguayo, les pido que hagan un sacrificio mayor”.

Un empresario, que durante el primer semestre del año incrementó su patrimonio en apenas tres millones de dólares, consideró que las palabras de Lacalle Pou son “duras pero sensatas”, y consideró que el sector empresarial debería hacer “una autocrítica”. “El drama de la pobreza no se va a solucionar solo. Los empresarios tenemos que hacer algo. Es hora de bajar más los sueldos a los trabajadores, de pagar cada vez menos impuestos, de terminar con las regulaciones estatales. Es cierto que hemos hecho muchos esfuerzos en ese sentido. Pero yo me pregunto, ¿qué le decimos al niño que no tiene para comer? ¿Le decimos ‘mirá, ganamos muchísimo dinero, pero no tanto como para que finalmente salgas de la pobreza’? No podemos hacer eso. Debemos enriquecernos en serio”.