Desde hace ya varios años el Sindicato Anestésico Quirúrgico (SAQ), gremio que agrupa a estas especialidades médicas, reclama por representar en la negociación salarial a sus afiliados y que no lo haga el Sindicato Médico del Uruguay (SMU). En este lapso hubo paros, denuncias, y una constante pulseada por quién es la voz y tiene el voto de los anestesistas y cirujanos. En ese marco, ahora el Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA) dejó sin efecto el convenio colectivo entre el SMU y la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) para la formulación y diseño de Funciones de Alta Dedicación (FAD) para Ginecotocología, a partir del reclamo del SAQ efectuado en 2017.

La reforma del trabajo médico que impulsa el SMU tiene entre sus ejes principales la contratación mediante cargos o funciones de alta dedicación –abreviados con la sigla CAD, en el sector mutual, y FAD en ASSE–. Los primeros CAD se crearon en 2012 en el mutualismo, y en 2014 se sumó ASSE con las FAD. En 2017 el prestador público firmó un acuerdo con el sindicato médico, la Federación Médica del Interior (FEMI) y el Ministerio de Economía y Finanzas que creó las FAD para especialidades anestésico-quirúrgicas, una resolución a la que los cirujanos y anestesistas se opusieron.

En diciembre del año pasado quedaron nulos los convenios para Anestesiología y Cirugía General por resolución del TCA. Esto, sumado a la reciente sentencia, corona la anulación de los acuerdos de las FAD. “Los tres acuerdos tripartitos fueron abolidos, y ahora hay que buscar una nueva forma de relacionamiento de un montón de colegas que están trabajando”, señaló a la diaria el presidente del SAQ, Daniel Montano.

Para Montano, la resolución del TCA significa que el SAQ tenía razón y que “no se pueden modificar regímenes laborales que estaban pautados por convenios laborales que se habían firmado con el SAQ, sin la participación del SAQ”. Según el presidente del gremio, al momento de la elaboración de los contratos desde el SAQ se afirmaba que “no eran cargos buenos, que no favorecían el trabajo de nuestro colectivo y que además no beneficiaban el desarrollo de las especialidades”, sino que, por el contrario, “lo frenaban”. Sin embargo, subrayó que el SMU argumentaba que “era el sindicato más numeroso en cuanto a afiliados, que tenían la posibilidad de representar a todo el colectivo médico, y eso no es así”.

La incertidumbre de los puestos

En el Comité Ejecutivo del SMU todavía no trataron el tema, pero según José Minarrieta, secretario médico del gremio, les solicitaron a sus asesores legales un informe “para ver bien qué alcance y consecuencias puede tener esta definición”. Por otro lado, contextualizó que desde el sindicato médico están “muy consustanciados con el proyecto de reforma del trabajo médico, de concentración del trabajo y de pelear contra el multiempleo, y por lo tanto todo lo que atente contra la reforma es algo negativo”. “No estamos de acuerdo con el espíritu de lo resuelto”, resumió.

Además, les preocupa puntualmente qué sucederá con los cargos que fueron anulados a partir del cese del convenio: “No puede afectar a cargos que ya están presupuestados y funcionando”, manifestó Minarrieta. En esa línea, dijo que desde ASSE aseguraron al sindicato que los médicos continuarán en su puesto, pero todavía no tuvieron una “reunión formal” con la directiva, aunque ya la solicitaron.

La preocupación del SMU es compartida por el SAQ. Según Montano, esperan que “se respeten los derechos de los colegas que están trabajando”. “Los colegas sabían que esto podía pasar, pero se presentaron de buena fe a un llamado que hizo ASSE y lograron su ingreso a la Administración. Ahora no se puede desconocer la responsabilidad que tiene ASSE con estos funcionarios. No pueden ser ellos los que terminen siendo perjudicados”, esbozó.

“Para cumplir con el fallo, deberán sentarse las bases para una negociación cuyo contenido a priori no puede conocerse, sino que será fruto del resultado de aquella”, se lee en la resolución del TCA a la que accedió la diaria. En este marco, Montano aseguró que le plantearon a la directiva de ASSE una citación, pero “todavía no se ha consolidado esta instancia de negociación”. Aun así, en el Sindicato Anestésico-Quirúrgico son “optimistas de que se va a poder llegar a una solución, porque si ASSE realmente necesita estos cargos, que aparentemente eran fundamentales para el funcionamiento de ASSE, entonces hay que buscar la forma de diseñar cargos que realmente sean eficientes y que logren esos objetivos que se proponían”.

Si ASSE ya “no necesitara” estos cargos, dijo, “estamos en un montón de problemas, porque hay un montón de colegas que están trabajando con altas cargas horarias, que además tomaron definiciones con respecto a su dedicación a ASSE, y ahora sus cargos no existen”. la diaria intentó comunicarse con los jerarcas de ASSE, pero no obtuvo respuesta.