Este miércoles, por tercera vez, la Comisión de Promoción y Defensa de la Competencia (Coprodec) rechazó la última propuesta de Minerva, presentada en febrero, para adquirir las fábricas Inaler (San José), La Caballada (Salto) y Colonia, según la resolución publicada en el portal de Blasina y Asociados -empresa dedicada a los agronegocios-.
El nuevo intento de adquisición incluía modificaciones. Al márgen de las compras, Minerva –propietario del frigorífico Breeders & Packers Uruguay– se comprometía a la “reventa inmediata” de la planta de Colonia al Grupo Allana, una empresa de origen indio. Según supo este medio a través de fuentes vinculadas al sector, la compañía se especializa en la carne de búfalo.
El 16 de julio, ante la nueva propuesta de Minerva, la Coprodec dispuso de una prórroga por sesenta días del plazo original para decidir sobre la expansión, según consta en la resolución a la que accedió la diaria. Además, extendió el plazo para la presentación de terceros interesados hasta el primer día de agosto. Durante la prórroga, a finales de agosto, las empresas tuvieron un cruce de comunicados en el que plantearon posiciones antagónicas sobre la vigencia del contrato: Marfrig informó que había vencido el plazo para adquirir las plantas y que las partes no estaban obligadas a concluir la operación, mientras que Minerva expresó su discordancia y entendió que “el contrato sigue vigente” debido a que la operación continuaba sujeta a la aprobación de la Coprodec.
Esta vez, la Coprodec denegó tanto la compra como la “propuesta alternativa” y manifestó que “no se expedirá respecto a las visiones discordantes entre Minerva y Mafrig relativas a elementos esenciales del contrato, las que deben ser dirimidas en los ámbitos competentes”.
Rafael Normey, presidente de la Federación Rural, dijo a la diaria que “la noticia es muy buena” y esperaban la resolución, la cual consideran que “es contundente en su análisis de que este intento de concentración de industria frigorífica no se puede llevar adelante porque conlleva un riesgo muy alto de posición dominante”. A su vez, destacó que servirá como antecedente para el futuro y afirmó que están “convencidos de que estos intentos de concentración en industria frigorífica y en otro tipo de industria van a seguir existiendo, ya que es una tendencia mundial”.
Otras voces del agro también celebraron la decisión. Rafael Ferber, presidente de la Asociación Rural del Uruguay, dijo a Valor Agregado de radio Carve que “es una buena noticia” y “sirve para tomar enseñanzas y precauciones para adelante sobre la concentración, algo que cada vez crece más”.
De haberse concretado la adquisición de las plantas, Minerva habría pasado a controlar siete frigoríficos en el país –ya que es propietaria de los frigoríficos PUL, Carrasco, Canelones y BPU–, posicionándose al frente del mercado de faena de ganado bovino en Uruguay con aproximadamente el 45% de la faena.
La intención de expansión se anunció en agosto de 2023 y estuvo enmarcada en un paquete de compras más grande que incluía, en total, la adquisición de unas 16 plantas de Marfrig distribuidas en varios países, valoradas en unos 1.500 millones de dólares. Si bien tres de ellas están en Uruguay, 11 se encuentran en Brasil, una en Chile y una en Argentina. En 2024, la Copdrodec rechazó originalmente esa intención por entender que llevaría a la concentración en el mercado y profundizaría la concentración de la industria. Minerva apeló y el Ministerio de Economía y Finanzas volvió a rechazar la solicitud en segunda instancia en diciembre del año pasado.