La fórmula presidencial del Partido Nacional (PN), integrada por Álvaro Delgado y Valeria Ripoll, participó este martes en un acto partidario que se desarrolló en el hotel Radisson de Colonia del Sacramento.

Ripoll destacó el carácter “complementario” de la fórmula nacionalista, integrada por un postulante a presidente que “toda su vida ha sido militante del PN” y que “también ha sido parte de este buen gobierno, y que en plena pandemia nos daba la tranquilidad, la certeza cotidiana”, así como “a la hora de gobernar, quien llevará adelante el segundo piso de transformaciones”.

En la mesa en la que se sentó la fórmula blanca también se ubicaron otros referentes nacionalistas, como Laura Raffo, Javier García, Carlos Moreira, Jorge Gandini, Carlos Camy, Luis Alberto Heber, Mario Colman, Carlos Iafigliola, María de Lima y Macarena Rubio, entre otros. 

Ripoll se autodefinió como “militante social y sindical” y con relación a su vínculo en el pasado con el Frente Amplio (FA) dijo que “hacía muchos años estaba por fuera de la política partidaria, desencantada, porque era usada por quienes prometieron cambios y no lo hicieron”. En forma reiterada, la postulante nacionalista aludió a gobiernos y dirigentes del FA, aunque sin nombrar a esa fuerza política ni a ninguno de sus integrantes.

De ese modo, la dirigente blanca resaltó a Delgado como “gobernante y como persona”, porque “se preocupó por la discapacidad y el autismo”, y cuestionó “a otros gobiernos que se creen los dueños de las causas sociales, y que plantearon que este gobierno venía para borrar todo, aunque hizo más en cuatro años que otros en 15”.

Según Ripoll, las personas que realizan “cuestionamientos a este gobierno nunca se embarraron los pies recorriendo un asentamiento”, y aseguró que “cuando estás cerca de la gente, las propuestas que hacés le pueden cambiar la vida a las personas”. “El PN tiene conciencia social y está cerca de la gente”, aseguró la expresidenta del gremio de trabajadores municipales de Montevideo. 

A su turno, Delgado valoró que en ese acto “está todo el PN junto y unido, y que está preparado y pronto para seguir gobernando”, porque “ofrece certezas a la gente sobre la gestión, los resultados y el futuro”. Al igual que lo hizo el FA en la campaña electoral de 2019, que insistió sobre la promesa de “certezas” a los votantes de cara al futuro tras haber gobernado a lo largo de tres períodos, Delgado replicó la fórmula cinco años después: “La gente tiene que decidir entre el futuro y la certeza o el pasado y la incertidumbre”, dijo.

“Nadie puede decir que el Uruguay de hoy no es mejor que el de 2019, con mejores indicadores económicos, con menos desempleo, con mayor crecimiento de puestos de trabajo, con menor inflación, con mayor inversión y con mayor salario real que 2019”, resaltó Delgado.

A la hora de enumerar los logros de la gestión encabezada por el presidente Luis Lacalle Pou, Delgado también hizo referencia a la refacción de la Plaza de Toros de Colonia del Sacramento, a pesar de que fue un proyecto encaminado por el último gobierno del FA, tal como lo reconoció el presidente Luis Lacalle Pou en el acto de inauguración.

En primera instancia, los referentes del nacionalismo coloniense habían cursado una invitación a los medios de ese departamento para concurrir al encuentro en formato de conferencia de prensa. Sin embargo, al llegar al hotel los periodistas encontraron un salón atiborrado de militantes ubicados frente a la mesa de expositores, mientras que a los trabajadores de la prensa se les había destinado un lugar al fondo de la platea, lugar desde el cual deberían lanzar las interrogantes.

Esa situación provocó que los periodistas expresaran a los organizadores de ese evento que no trabajarían bajo esas condiciones, lo cual trajo aparejado un nuevo ordenamiento de la disposición de los militantes, quienes finalmente permanecieron detrás de las cámaras y de los cronistas.