“A todos nos sorprendió que bajara la cantidad de test en estos días, pero algunas explicaciones hay”, aseguró el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, durante su visita a la Comisión de Salud Pública este martes.
Salinas sostuvo que hace 45 días se les había pedido a los prestadores de salud que robotizaran las “técnicas de biología molecular con nivel de seguridad 2” para procesar los test, que “en muchos casos se basan en personas”. Según el ministro, los prestadores que lo hicieron “aumentaron la capacidad de respuesta, pero otros encargaron los equipos y todavía no robotizaron”, por lo que “el pipeteado [que es la toma de la muestra] se tiene que hacer manual”.
¿Qué ocurrió entonces? Según el ministro, en fechas “tan especiales” como el 25 de diciembre y el 1º de enero “pudo haber una merma” en el procesamiento de los test, aunque no en las fechas posteriores.
El ministro, no obstante, también tuvo una explicación para la baja de test el resto de los días.
“Hay dos factores que lo pueden explicar”, puntualizó. El primero, sostuvo, es que los extranjeros que llegaban en los cuatro vuelos diarios de Air Europa, Iberia y Copa a los siete días se tenían que testear, lo que aumentaba la cantidad de test que debía hacerse. “Eso nos aumentaba el n, es decir la cantidad de test que estábamos realizando”, sostuvo el ministro, y aseguró que en ese entonces “estábamos pescando en una pecera de casos poco probables”, mientras que ahora, luego de que se restringiera aún más las llegadas del exterior, “estamos pescando en una pecera de contactos y ello explica la mayor positividad”.
El segundo factor, sostuvo, es que con el incremento de casos, la Junta Nacional de Salud tomó una serie de medidas en aras de evitar la saturación del sistema a nivel de CTI y que “no hubiera que hacer ningún tipo de elección de pacientes”. “Así, algunas cirugías coordinadas en la región metropolitana –Montevideo y Canelones–, en la ciudad de Rivera y en la ciudad de Chuy se difirieron, con excepción de las oncológicas y las de urgencias. ¿Qué implica esto? Que cayera el número de test que se estaban haciendo para ingresar a un sanatorio en Montevideo, Canelones, Rivera y Chuy”, sostuvo.
“La primera explicación es el feriado; la segunda: la gente que venía del exterior que se tenía que testear al séptimo día y los que se testeaban en el aeropuerto al ingreso –que era la minoría–, y la tercera explicación es la determinación del feriado quirúrgico para tener disponibles camas de CTI”, resumió el ministro.
Test antigénicos y capacidad de rastreo
Salinas también anunció que el martes el Ministerio de Salud Pública comenzó a distribuir 40.000 de los 100.000 test antigénicos que se le compró a la Organización Panamericana de la Salud. Estos test, aseguró, van a permitir amplificar la capacidad de testear.
Durante su comparecencia, el jerarca aseguró que no existe un desborde en la capacidad de rastreo. “Tuvimos un incremento importante en la cantidad de rastreadores y nos hemos organizado mejor en cuanto a ser más efectivos en el cuestionario, procurando dos cosas fundamentales desde el punto de vista epidemiológico: saber si la persona tuvo nexo y concentrarnos en la lista de contactos, porque esa es la clave para evitar la diseminación. Hemos sido perros de caza en ese sentido”, dijo el jerarca. El ministro además informó que la aplicación Coronavirus Uy sirvió para contactarse con 300 personas que habían estado expuestas a contactos con casos positivos.