Entre agosto y diciembre, la temporada de ópera ofrecerá cuatro títulos y un espectáculo invitado (ver recuadro). El director de la Banda Sinfónica de Montevideo, Martín Jorge, dijo a la diaria que, por un lado, se proponen ofrecer una mirada tradicional para los seguidores del género, que pueden encontrar los clásicos títulos de ópera, con puestas y miradas habituales, y, por otro, también apuntan a ofrecer un espectáculo distinto y nuevos títulos (si bien este no es el caso de este año, sí lo fue en 2017 y 2018, cuando se estrenaron El cónsul y Werther). Por eso, esta temporada abordarán títulos clásicos con una mirada escénica y una puesta no convencional. “El Rigoletto de Verdi tendrá una aproximación tradicional, con una puesta, una acción y un vestuario de época que es parte de la producción del teatro Colón [de Buenos Aires], pero, en el caso de La flauta mágica [de Mozart], encargamos una nueva producción a una directora italiana, especialista en ópera, Zamira Pasceri –integrante del equipo de la Fura dels Baus–, y le dimos la libertad creativa para que ella pudiera llevar al lugar de expresión que quisiera esta historia que Mozart y [Emanuel] Schikaneder hicieron como cuento de hadas”, cuenta el director de la banda. Así fue como Pasceri propuso trabajar este viaje iniciático por medio del mundo de rituales, y lo “transformó en lo que los astronautas sufren a nivel psicológico cuando ven a la Tierra, realmente, desde afuera. Ella abordará con una mirada distinta a este viaje iniciático de hace dos siglos, a partir de este efecto que tendrá que ver con el espacio, con el planeta y la ecología, entre varios temas”.
Para el director, esta es una gran ópera, que, además, fue la última que compuso Mozart, está cargada de una “enorme simbología”, y el compositor la “pensó como una ópera popular, por eso no está en italiano sino en alemán, en el lenguaje del pueblo”. Para Jorge –que hizo su primera asistencia para Federico García Vigil, justamente con este título– se trata de una obra única y sin antecedentes que está presente en el oído colectivo popular: “muchos de sus fragmentos, la obertura, el aria de la ‘Reina de la Noche’ y los momentos de la flauta”. A su vez, indica que es un título que permite un juego con muchas perspectivas, ya que implica un cuento de hadas, un viaje iniciático o rituales francmasones, y eso contribuye a que acceda un público muy distinto, más allá de los elencos de artistas nacionales y extranjeros, y la dirección de Ligia Amadio.
Zarzuela a la uruguaya
En una época en la que se reivindica el cruce de lenguajes escénicos, como es el caso de las últimas producciones del Ballet Nacional del Sodre (BNS, con El Quijote del Plata y La tregua), la temporada de ópera sigue apostando a incluir zarzuela, un género que surgió en España, en el siglo XVII, impulsada por dramaturgos como Lope de Vega y Calderón de la Barca. Esta forma musical se caracteriza, en general, por contar con partes habladas, instrumentales y vocales. Jorge recuerda que, desde lo público, hacía muchísimos años que no se la incluía, hasta que, en su momento, la Banda Municipal presentó la idea de producir La verbena de la paloma (2017, con dirección musical de Jorge y dirección escénica de Jimena Márquez). El título se sumó a la temporada y “posibilitó que se integraran los elencos estables, algo que antes no se daba y que es muy positivo”. En esa línea, el año pasado, Andrés Papaleo, integrante de la Comedia Nacional (CN), hizo la asistencia de la dirección de El barbero de Sevilla; y Marianella Morena, la de El castillo de Barbazul (este 2019, La revoltosa tendrá a la española Amelia Ochandiano como directora escénica).
En el caso de la zarzuela, recuerda que cuenta con una “especialidad de tipo de canto que es el del actor cantante, prácticamente inexistente fuera de España”, pero, al hablar con Mario Ferreira, director de la CN, confirmó que “todo el elenco canta muy bien, y debemos integrarlo”. En este caso, Claudia Rossi, Luis Martínez y Daniel Spino Lara interpretarán a los cinco personajes principales, en paralelo a las voces líricas protagónicas.
Voluntad de que exista
Para el director, esto responde a que hay una mirada política de que la ópera debe existir, ya que “no tiene una estructura propia” dentro de la Intendencia de Montevideo (IM), como es el caso del Teatro Solís, la Orquesta Filarmónica, la Banda Sinfónica y la CN, de modo que depende “de la voluntad de cada administración”. En su momento, la responsabilidad recayó en el Solís (luego de su reapertura); después, bajo la figura de Augusto Techera –actual director de la producción artística del teatro Colón–, y luego él se hizo cargo de la curaduría. Señala que, a partir de la última administración, se apunta a un trabajo en equipo entre los distintos elencos, atendiendo a la realidad de lo que se requiere y lo que es posible concretar. “Creo que el Solís es el teatro de ópera más eficiente de Latinoamérica, porque con muy poco hacemos mucho. En este rubro, es el teatro con un presupuesto de inversión de los más bajos del continente, si bien toda la estructura de estos ítems hace posible la existencia de una temporada lírica”.
A través de la variedad de las propuestas intentan “desmitificar que un producto cultural como la ópera sea para un público selecto o entendido, y esto no quiere decir que en las propuestas artísticas no cuidemos al público específico. Tampoco creemos que sea un género que se esté muriendo, y, por supuesto, tampoco se trata de un partido de fútbol. Más allá de situarlo en su lugar, nuestro esfuerzo está en brindar espectáculos y acercarlos a la gente para que pueda disfrutarlos. Después del ejemplo del BNS, algo que aprendimos todos los que trabajamos en el medio cultural es que hay público, y si los espectáculos son de calidad, la gente responde”.
Agenda
- La flauta mágica abrirá el año lírico el 14, 16 y 18 de agosto. Con Ligia Amadio al frente de la Orquesta Filarmónica de Montevideo, y la dirección escénica de la italiana Zamira Pasceri (la preventa comienza hoy).
- El 21 y 22 de agosto, la temporada recibirá un espectáculo invitado, en el marco del Festival Internacional de Artes Escénicas: el musical operístico El hombre de la mancha, de Dale Wasserman, que inauguró la temporada lírica del Teatro de La Moneda (Bélgica), con Eduardo Pitufo Lombardo y Martín Jorge como artistas invitados.
- La mezzosoprano española Nancy Fabiola Herrera ofrecerá un concierto el 27 de agosto, que contará con una primera parte de ópera y una segunda de zarzuela.
- Rigoletto, la emblemática ópera de Giuseppe Verdi, irá el 13, 15 y 17 de setiembre, con producción del teatro Colón de Buenos Aires, dirección musical de Martín Jorge, y dirección escénica de Jorge Takla.
- La comedia musical La revoltosa tendrá lugar entre el 18 y el 21 de diciembre, de la mano de la Banda Sinfónica y la dirección de Martín Jorge. La puesta en escena estará bajo el mando de Amelia Ochandiano.