“Chano se encuentra en este momento en la terapia intensiva del Sanatorio Otamendi víctima de un disparo que recibió por parte de la Policía provincial como resultado del cual resultaron afectados uno de sus riñones, el páncreas y el bazo”, decía el comunicado difundido este lunes de mañana por la familia de Santiago Chano Charpentier y recogido por distintos medios de prensa argentinos.
La información fue volviéndose más precisa a medida que avanzaba el día, y a primeras horas de la tarde ya se informaba que el ex integrante de Tan Biónica había sido intervenido y se le había extirpado “el bazo, el cuerpo y cola del páncreas, el riñón izquierdo” y se le había suturado una perforación del colon. “Análisis de cavidad abdominal y el retroperitoneo. Le dejaron varios drenajes”, terminaba diciendo en Twitter el periodista de espectáculos Leo Arias, remitiendo a fuentes de la familia Charpentier.
La situación que terminó con el músico en terapia intensiva empezó en el barrio privado Parque La verdad, en Exaltación de la Cruz, provincia de Buenos Aires. Según la agencia Télam, Chano fue baleado en el abdomen “por un policía bonaerense al que intentó apuñalar con un cuchillo en medio de un brote psicótico, durante el cual también agredió a su madre”.
La Policía había llegado al lugar alrededor de la 1.30 de la madrugada del lunes, luego de haber recibido una llamada que avisaba que dentro de una de las casas del complejo había un hombre que se había puesto muy agresivo. Siempre según la agencia, que recoge la información proporcionada por fuentes policiales y judiciales, cuando llegaron los efectivos encontraron al músico, de 39 años, en una crisis psicótica aparentemente producida por el consumo de droga.
En la vivienda estaban también la madre y el padrastro de Chano, y una ambulancia en la que pretendían conducirlo a una institución médica. La madre habría dicho a la Policía que su hijo había intentado agredirla. Y a partir de ese momento es que la situación se oscurece, porque la fuente policial manifiesta que el músico salió de la casa empuñando un cuchillo y con intenciones de agredir a un efectivo, pero su madre declaró más tarde a la periodista Sandra Borghi, de TN, que “a Chano le dispararon sin que él haya tenido una reacción previa”. “Él no tuvo ningún brote psicótico, lo que tuvo es un cuadro de excitación psicomotriz. Él no se abalanzó. En ningún momento atacó a nadie. No intentó agredir a nadie y menos a una mujer”, agregó.
Este no es el primer episodio confuso protagonizado por Chano Charpentier en los últimos días: el viernes, el músico llamó al 911 para denunciar que su madre estaba “mal de la cabeza” y había llegado hasta su casa “con cuatro médicos que yo no llamé” diciendo “que me va a judicializar y me va a meter en un psiquiátrico”.
El caso, que fue caratulado como “atentado y resistencia a la autoridad y lesiones”, está a cargo del fiscal Juan Manuel Esperante, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Exaltación de la Cruz del Departamento Judicial de Zárate-Campana.
En horas de la tarde el músico estaba estable y el policía que le disparó había entregado el arma para que se realizaran las pericias correspondientes. En la casa de Chano se encontró marihuana en poca cantidad y medicamentos que serán analizados. Había bebidas alcohólicas pero según las fuentes judiciales consultadas por Télam no parecían haber sido consumidas en exceso.