La Comedia Nacional celebra en 2022 sus primeros 75 años, a los que llega con la reciente designación de Gabriel Calderón como director general y artístico. Estos dos elementos hicieron que el lanzamiento de su nueva temporada fuera muy especial, y que figuras actuales y pasadas de la Comedia se hicieran presentes en la sala Demira Agustini del teatro Solís y colmaran sus instalaciones.
La primera en tomar la palabra fue la directora de Promoción Cultural de la Intendencia de Montevideo, Débora Quiring, quien confirmó que este año se implementará un llamado a concurso para ocho nuevos integrantes estables, cumpliendo así con “una demanda que tiene hace muchísimo el elenco”, además de un convenio con la Federación Uruguaya de Teatros Independientes (FUTI).
Quiring agregó que la actual gestión municipal decidió “fortalecer a la Comedia Nacional, y eso necesariamente es fortalecer al medio. Decidimos retomar prácticas y fortalecerlas: fortalecer las giras por los barrios, fortalecer el intercambio con el resto del país y fortalecer la proyección internacional”. En este último punto, Quiring adelantó que este año la Comedia irá al Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, en España.
A continuación, Calderón comenzó con un pensamiento que planteó al elenco y que el elenco le planteó a él. “Queremos salir, queremos estar con el teatro independiente en estos momentos. No creo en esa dicotomía del teatro independiente y el teatro oficial”. Calderón recordó que ambos teatros vienen de momentos muy duros, “no sólo por la peste. Algunos están acarreando una peste mucho más larga, de desintereses, de desidias, de pérdidas económicas”.
“Lo hablamos con todos y todas y están de acuerdo en unirnos, y encontrar no sólo aquello que nos une, sino la responsabilidad de que aquello que nos una sea teatro. Nosotros somos la Comedia Nacional, no somos un fondo de ayuda, no somos una línea estratégica. Tenemos que hacer obras. Tenemos que buscar obras con el teatro independiente, que es lo que hacen; con los artistas, con los jóvenes que salen de las escuelas para hacer teatro. Nuestra responsabilidad y exigencia sigue allí”.
Calderón recordó que la idea que acompañará a la Comedia este año será la de “el teatro incendiado”, en referencia a “una de las tragedias más usuales y más terribles” que ocurren en los teatros. “Es una maldición que nos acompaña y que nos hace de vez en cuando tener que salir de nuestra casa. Somos de la idea de que en este momento el teatro se está incendiando en la ciudad. No estamos tranquilas y tranquilos. No estamos bien”. Y para eso saldrán a trabajar.
A la hora de referirse a la programación, repasó una por una las obras que eligieron para este año. Comenzó por Estudio para la mujer desnuda, “un texto difícil” que llegará el 2 de abril a la sala principal del teatro Solís. Se trata de una obra de Leonor Courtoisie, quien también la dirigirá, y se basa en la novela La mujer desnuda, de Armonía Somers. La dramaturgia estará a cargo de Laura Pouso.
El 7 de abril se estrenará en la Sala Verdi Todo su asco del mundo, siete piezas breves de Thomas Bernhard con adaptación y dramaturgia de Laura Pouso y dirección de Vanessa Cánepa, Vachi Gutiérrez, Soledad Lacassy, Elaine Lacey y Julieta Lucena, un título “ineludible e indudable” en estos tiempos que corren. Más adelante, en junio, llegará Calderón x 3. El chileno Guillermo Calderón escribe para la Comedia Nacional una obra inspirada en El príncipe constante, de Calderón de la Barca, que será dirigida por Gabriel Calderón. Con dramaturgia de Laura Pouso, será también el título que se presentará en el mencionado festival de Almagro.
También en junio llegarán otras dos obras. La trágica agonía de un pájaro azul, de la chilena Carla Zúñiga, con dirección de Domingo Milesi, es “una comedia negra que habla de la muerte, la soledad, la maternidad y el fracaso”, en palabras de su propia autora. Y en el teatro Stella, en coproducción con la FUTI y La Gaviota, llegará La trilogía de la indignación, del catalán Esteve Soler, en la que el autor propone argumentos contra tres pilares de nuestra sociedad: el amor, el progreso y la democracia. Por este convenio, una vez que la Comedia deje el teatro, tanto los derechos como los elementos materiales permanecerán para que la obra siga siendo representada por el elenco independiente.
En octubre, en la sala principal del Solís se estrenará Tiempo salvaje, escrita y dirigida por el también catalán Josep María Miró. Se trata de una sugerencia de la anterior administración de la Comedia Nacional, en lo que será el estreno absoluto de este texto en América Latina. También en octubre, a la sala Zavala Muniz llegará El salto de Darwin, de Sergio Blanco y dirigida por Roxana Blanco, quien en 2010 se puso en la piel del personaje de Kassandra y lo representó en 20 países.
Finalmente, octubre también traerá Las actas, que se presentará en el Teatro Circular, en una coproducción de la FUTI y el Circular. Calderón se refirió a esta obra escrita y dirigida por Margarita Musto como “un acto de valentía”. La pieza performará las declaraciones de Gilberto Vázquez ante el tribunal de honor militar al que fue sometido luego de su recordada fuga, que significó una afrenta a los códigos de la institución.
La última obra de esta temporada será Esperando la carroza, de Jacobo Langsner. La célebre pieza fue estrenada en 1962 por la Comedia Nacional, aunque el director recordó que no fue un éxito, y agregó: “No es su mandato estrenar éxitos”. La obra “explotó” en el año 1974 en el Teatro Circular, luego cruzó a la vecina orilla y en 1985 se convirtió en una película recordada hasta nuestros días. Esperando la carroza se estrenará en el interior en setiembre y habrá una gira nacional antes de su llegada a Montevideo a fines de octubre.
Para cerrar, Calderón anticipó que para el fin de semana de los 75 años el teatro Solís permanecerá abierto, “encendido”, durante 24 horas seguidas, no solamente con obras de teatro, sino también con otras actividades artísticas.