Progreso 1-1 Liverpool

Los locales comenzaron ganando el partido 1-0 por el gol de Gonzalo Castillo a los 62 minutos. Después, Liverpool hizo todos los méritos para empatarlo, incluso cuando la tarde se picó y se fueron expulsados Ignacio Lemmo en Progreso y Pablo Caballero en los de Belvedere. Cuando parecía que Progreso ganaría –en gran medida por la notable actuación de su golero, Sebastián Fuentes–, apareció Leonardo Melazzi a los 86 para empatarlo y hacer la división de puntos, uno por lado. Los dos equipos fueron siempre al frente y Liverpool, que hasta hace unos días coqueteaba con pelear el Torneo Clausura, quedó muy lejos de los puestos de arriba. Pero aún tienen chances intactas de ir a la Sudamericana (lo más probable) o meterse en la Libertadores. Son dos muy buenas campañas, la de Progreso y la de Liverpool.

Torque 1-1 Atenas

El partido en el desolado Centenario comenzó con toda. A los 6 minutos de juego, José Álvarez, que arrancó como titular y salió lesionado a los 40, puso el 1-0 para los carolinos. Sorpresa. Pero Torque juega bien, la cancha del estadio lo favorece, y los de Pablo Marini empezaron a apretar a la defensa ateniense y en un par de ocasiones generaron peligro.

El segundo tiempo, por lo menos en los primeros instantes, fue una continuación del primero y, también como en la primera parte, cayó un gol a los 6, pero de Torque: el melense Pablo Olivera apareció muy pero muy solo en el área chica, bajó la pelota con el muslo y definió de media vuelta para poner el partido 1-1.

El punto tiene más sabor para Torque que para Atenas pensando en la permanencia, aunque para los carolinos puede ser un envión para encarar la recta final del campeonato.

Racing le ganó 2-1 a River en el Roberto

Jesús Trindade, festeja un gol de Racin a River Plate.

Jesús Trindade, festeja un gol de Racin a River Plate.

Foto: Fernando Morán

Impresionante lo que se vivió en el Roberto, en el barrio Sayago de Montevideo. La victoria de Racing es para encuadrar, porque se dio de la mejor manera: en la hora, después de que River se lo empatara, ya con el último suspiro. Fue Jean Pierre Barrientos el autor del 2-1, tras un preciso centro frontal de Ángel Cayetano, que fue intercedido por un cabezazo del de Racing –un nucazo, más bien– antes de que Nicola Pérez pudiera atacar el balón. Se desató la locura con el gol, porque los tres puntos son más valiosos aun para la tabla del descenso. Y porque, hay que insistir, fue en la última jugada, con el corazón en la boca. Épica tarde.

Antes, tan solo unos minutos antes, Mauro da Luz lo había empatado, también de cabeza, y estampaba en el marcador la superioridad de River en la segunda parte. Pero Racing no afjojó, se replegó y salía de contra con Alex Müller. En el primer tiempo, los de Juan Tejera jugaron muy bien y por eso se pusieron 1-0: Jesús Trindade marcó el gol. Para la segunda etapa, River apiló delanteros, lo empató, pero se le escapó en la última. Racing se quiere quedar en primera.