Por un lado, Sebastián Bauzá; por el otro, Ignacio Alonso, ambos con sus respectivas comitivas. La reunión entre los jerarcas de la Secretaría Nacional del Deporte (SND) y la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) fue el primer eslabón de una cadena que, si todo sucede dentro de lo esperado, llevará a que el fútbol uruguayo retorne en agosto. El protocolo fue presentado por la AUF; la SND lo estudiará y lo pasará al Ministerio de Salud Pública y a la comisión de científicos que asesoran al gobierno nacional. Una vez las autoridades nacionales den el okay, los clubes de Primera pondrán marcha al plan retorno.
“Si la realidad sanitaria del país lo permite, se analizará acortar los plazos. El objetivo para volver a competir sigue siendo el 15 de agosto. Los planteles necesitan seis semanas previas para entrenar”, dijo Alonso al término de la reunión.
Lo que dice el protocolo
Antes de entrar en los detalles en cuanto a lo que hay que hacer para minimizar los riesgos del coronavirus y sus posibles contagios a través del fútbol, el protocolo elaborado por la AUF hace hincapié en que las principales bases para hacer frente a la pandemia son la educación, la higiene y los cuidados.
La fase 0 es el comienzo. Habrá test epidemiológicos en jugadores, cuerpos técnicos y funcionarios de los clubes. Ante cualquier positivo, se recomienda aislar a la persona en cuestión. La indumentaria que se usará en los entrenamientos se les entregará a los jugadores 48 horas antes de la primera práctica, en bolsa cerrada, de manera que los futbolistas no deban trasladarse para tenerla, y así se disminuye su exposición. Ese paquete deberá ser desinfectado por el propio jugador.
Una vez recorridos esos primeros 15 días, comienza la fase 1. Los planteles podrán entrenar en dos grupos, divididos en horarios diferentes. A su vez, cada grupo se subdividirá en dos y ocuparán cada uno una mitad de la cancha.
Un aspecto importante es el de los traslados de los deportistas. La recomendación es que se muevan en vehículos particulares y que, en caso de compartir auto, no sean grupos con más de tres personas. En todos los casos, serán los clubes los que deban proveer de guantes y tapabocas a todos sus trabajadores. Una vez en el lugar de entrenamiento, los futbolistas deberán bajarse ya cambiados para practicar, porque los vestuarios estarán cerrados. Las botellas de hidratación deberán ser individuales, los saludos serán verbales o con los codos, pero nunca tocándose. Las charlas técnicas, a su vez, deberán realizarse en lugares abiertos y respetando los dos metros de distancia entre personas.
En la fase 2 los equipos comenzarán a entrenar con mayor intensidad y de forma colectiva, previo a ser evaluados por el médico, quien medirá la temperatura y consultará sobre posibles síntomas.
En esta nueva fase sí podrán usarse los vestuarios y los gimnasios, y la ropa de práctica será entregada en cada club.
En la fase 3 todo se intensifica. Los grupos podrán trabajar todos juntos y ya se podrá tener partidos amistosos pensando en el campeonato. Hay una recomendación para las concentraciones: en primera instancia, se recomienda que las concentraciones se realicen de forma individual y domiciliaria. A medida que la fase 3 se vaya acercando a la 4, se podrá concentrar en grupo, pero siempre y cuando sea inevitable. Si no, mejor de forma individual. En ambos casos será fundamental la higiene y el distanciamiento físico responsable.
En la fase 4 comienza la competencia. La desinfección en los materiales para practicar o jugar será clave, al igual que evitar compartir botellas o elementos de higiene personal. Los partidos, siguiendo las recomendaciones gubernamentales, serán sin público presente. Los hinchas tampoco podrán asistir a los entrenamientos, salvo que las autoridades nacionales digan lo contrario.
Un tema importante es el de los test y sus posibles repercusiones. Si existieran casos positivos de coronavirus, las medidas a tomar serán distintas según en la etapa en que se esté. Si es en las fases 1 y 2, quienes den positivo serán aislados de forma individual; pero, por el contrario, si los positivos se dieran entre las fases 3 y 4, el protocolo marca que será todo el plantel el que pasará a cuarentena. Si fuera en etapa de campeonato, el club rival al que se le detectaron casos de covid-19 también tendrá que cumplir cuarentena.