Tras 120 minutos sin goles (90 más el alargue), Nacional, luego del 0-0 ante Wanderers, se quedó por penales con el Torneo Intermedio. Emiliano Martínez, como con Independiente del Valle en la Libertadores, definió la serie y le dio la copa al bolso, pero antes, Guillermo Centurión contuvo dos penales.
Las chances de gol llegaron recién en el segundo tiempo y fueron para Nacional, pero la buena actuación del golero De Arruabarrena impidió que hubiera goles durante el partido, por lo que se pasó a un alargue en que hubo una chance de gol para cada lado que no se concretó; en la definición por penales el tricolor selló el triunfo del campeonato.
El partido empezó entreverado. A los 16 una volea de Felipe Carballo de afuera del área terminó en el córner por responsabilidad, como casi todo el partido, de De Arruabarrena. Enseguida, con un buen centro de Oliveros, cabeceó Corujo y de manera notable sacó nuevamente el golero bohemio. A los 21 Wanderers llegó sorpresivamente luego de un saque rápido, que terminó en un tiro de esquina. Por momentos daba la impresión de que se tornaría en un partido de ida y vuelta, pero esto nunca sucedió y no hubo llegadas importantes.
El primer tiempo se fue con mucha intención y poco juego, la última fue una chance para los del Prado, pero luego de un extraño rebote Centurión se quedó con el balón.
El complemento
El segundo tiempo fue un tanto más interesante, con más iniciativa tricolor y una actuación notable de Ignacio de Arruabarrena. A los 50, ya con la noche cubriendo el Centenario, sobresalió Nicolas Quagliata de remate cruzado, pero el partido seguía en la misma sintonía, sin oportunidades claras para ninguno, y aunque Wanderers empezó mejor, quedó sólo en intentos, por lo cual Carreño no dejaba de reclamarles a sus futbolistas. Llegaba más Nacional, pero estas chances de los tricolores no hicieron más que destacar al golero bohemio: a los 68 hizo otra gran tapada ante un disparo de Villar, y a los 72 atajó de forma espectacular un cabezazo del capitán tricolor, Gonzalo Bergessio.
Ninguno pudo convertir durante el partido, por lo que el campeón debía definirse en el alargue, cuando el cansancio era moneda corriente. Allí, en el área, donde cada chance de gol era más valiosa que nunca, hubo una oportunidad clara para cada lado: en el primer chico para los de Carreño y en el segundo para los de Giordano. A pesar de no haberlo plasmado en goles, los albos fueron más por lo hecho en el segundo tiempo y también en la prórroga, cuando si bien el cansancio les jugó una mala pasada, supieron aprovechar los espacios que por errores defensivos dejaba Wanderers, generando así varias chances de gol que no se concretaron por la buena actuación de Nacho de Arruabarrena.
En los penales, convirtió Bergessio, luego tapó Centurión a Nacho González; nuevamente convirtió Corujo para el tricolor; anotó Torres para Wanderers; hizo el suyo Ocampo para Nacional; volvió a atajar el juvenil Centurión a Bueno, y por último anotó Emiliano Martínez, y así Nacional se convirtió en campeón del Intermedio. Fueron cuatro adentro para el bolso y sólo uno para Wanderers.
Emiliano Martinez y el arquero Guillermo Centurion, de Nacional, luego de ganar la final del torneo Intermedio ante Wanderers, ayer, en el estadio Centenario.
Foto: .
.