En una cancha pesada y con mucha agua, Plaza Colonia, que debió afrontar más de una hora con diez futbolistas por la temprana expulsión del brasileño Diogo de Oliveira, empató sin goles en el Parque Prandi con Boston River y, cuando faltan dos fechas para la finalización del Apertura, quedó cuatro puntos arriba de Nacional, y seis sobre Peñarol y Liverpool. Esto quiere decir que con una sola victoria más será el campeón. Boston River, que sufrió la cancha tanto como Plaza, hizo un buen partido y complicó el juego de los colonienses.

Si no ganás, no pierdas (la ventaja)

Cuando no se puede ganar, no hay que perder, dice un viejo aforismo de las canchas. En este caso, aunque pudiera parecer que no era el resultado esperado e incluso que no es un buen resultado, este empate deja a Plaza con mayor ventaja que una fecha atrás y dependiendo de sí mismo para lograr el campeonato.

Fue muy costoso para Plaza el comienzo del partido. Por lo emocional, por el estado de la cancha, por la prestación del rival, por la ansiedad y la tensión del momento.

La idea prevalente era la de la calma, la paciencia, el control del rival y de la ansiedad. Tal vez la ansiedad fuera medianamente controlable en los primeros minutos, pero no lo fue Boston River, el rival, que vino con un partido pensado y planificado para jugar con el líder. Plaza no lograba componer un ataque con su menguado plantel, que sufre las ausencias, por lesión, de Juan Cruz Mascia y de Cristian Cebolla Rodríguez y ya no cuenta con Nicolás Albarracín, que fue transferido a Patronato de Argentina.

A la media hora, el grado de dificultad se incrementó para los colonienses porque, a instancias del cuarto árbitro, Pablo Falce, el juez principal, Daniel Fedorczuk, expulsó acertadamente a Diogo de Oliveira, quien al bajar a su campo para marcar terminó poniendo su pierna bruscamente sobre Leandro Lozano. Aun con uno menos y sin poder afirmarse en el partido ni mucho menos en la cancha, Yvo Calleros estuvo a punto de marcar para los colonienses, así como minutos antes había estado para que los montevideanos estuviesen a punto de anotar cuando, en un cierre forzadísimo, limpió la pelota al córner. En el caso de su jugada en el arco contrario, fue una corrida en la que dejó todo, con una definición cruzada que pasó llorando contra el caño de Gonzalo Falcón.

El punto del vestuario

En el segundo tiempo apareció mucho más manifiesto el dominio de Boston River. Dominaba por buen juego, por criterio ofensivo y por el acierto de sus futbolistas.

Plaza mantuvo su compromiso, el mismo de todo el campeonato, de cuando estaba lejos de soñar con el título, y alargó la sensatez –seguramente reforzada en el vestuario– de soportar el partido sin enloquecer. Así fue como otra vez gestó una jugada de casi gol –desborde de Emilio Zeballos y definición de Nicolás Dibble– en medio de muchísimas acciones de control y defensa.

El fiel del equipo, el eje de la experiencia y de entender el juego siguió siendo Álvaro Fernández jugando de 5; con un despliegue propio de diez años atrás, mantuvo la llama del mejor resultado posible para los colonienses.

Siguió atacando Boston River, buscando por afuera y con criterio, mostrando la solvencia del joven Santiago Mele en el arco de los colonienses.

Después Eduardo Espinel tomó la acertada medida de sustituir a dos de las figuras principales del equipo: Fernández y Dibble, teniendo en cuenta que ya sabe que para la próxima fecha tampoco contará con el Cebolla y Mascia, bajas a las que se suma la de De Oliveira, cuya suspensión automática le impedirá estar en el partido con Wanderers en Montevideo. Fue una buena decisión estratégica para un equipo que, contrariamente a las sensaciones que se podían percibir, estaba ampliando su ventaja y llevándola a cuatro puntos de diferencia cuando sólo quedan seis por jugarse, lo que significa que, pase lo que pase la semana que viene, llegará puntero a la última fecha frente a Rentistas. Un solo triunfo en cualquiera de los dos próximos fines de semana, ya sea sobre Wanderers en Montevideo o sobre Rentistas en la última fecha en Colonia, le dará el título de campeón a Plaza. Este punto del empate 0-0 con Boston River, jugando con uno menos durante más de una hora, aunque no sea el mejor resultado, es uno muy importante.

Detalles

Torneo Apertura 2021 – 13ª fecha
Estadio: Parque Prandi, Colonia del Sacramento.
Árbitros: Daniel Fedorczuk, Agustín Berisso, Julián Pérez.

Plaza Colonia (0): Santiago Mele, Haibrany Ruiz Díaz, Mario Risso, Nicolás Olivera, Emilio Zeballos, Yvo Calleros, Leonai Souza (82’ Elías Umeres), Álvaro Fernández, (73’ Ezequías Redín), Gonzalo Camargo (73’ Leonardo Suhr), Nicolás Dibble (73’ Imanol Enriquez), Diogo de Oliveira. Entrenador: Eduardo Espinel.

Boston River (0): Gonzalo Falcón, Leandro Lozano, Gastón Álvarez, Agustín Nadruz, Alexander Machado, José Alberti, Alan Rodríguez, Martín Fernández (82’ Luciano Olaizola), Facundo Labandeira, Enzo Larrosa (68’ Pablo Furtado), Facundo Rodríguez (68’ Maximiliano Pérez). Entrenador: Ignacio Ithurralde.

Goles: no hubo.
Expulsado: 32’ Diogo de Souza (PC).

Este martes se cierra la fecha con Deportivo Maldonado-Fénix

La antepenúltima fecha del Apertura recién habrá de terminar en la jornada del martes con el partido que en el Campus de Maldonado habrán de protagonizar, desde las 15.00, Deportivo Maldonado y Fénix.

La fecha 13, que se empezó a jugar el viernes, tuvo este lunes además del partido de Plaza Colonia-Boston River, el juego bajo agua en el María Mincheff, en Jardines, entre Sud América y Wanderers. Ganó la IASA 1-0 con un sorprendente gol de tiro libre del argentino Tomás Andrade.

El empate de Plaza le permitió ampliar ventaja; si el domingo le gana a Wanderers, será campeón. Plaza tiene 30 puntos. En la segunda colocación está Nacional, con 26, seguido por Peñarol y Liverpool, con 24. River Plate quedó con 22 puntos, Torque y Cerrito suman 18, Cerro Largo y Wanderers 17, Rentistas tiene 16, Fénix y Sud América 14, Deportivo Maldonado 12, Progreso 11 y Boston River 10, mientras que Villa Española cierra la tabla con 8 unidades.