Danubio derrotó a Stockolmo y puso la serie 1-0, al igual que Unión Atlética sobre Lagomar

O vos o yo, para un lado o para otro. Un partido de esos que definen al básquetbol como uno de los deportes más emocionantes que existen. Que dejan las pulsaciones de cualquier espectador a una frecuencia mucho más alta que la que su actividad física indicaría lógica. Sentado frente a un televisor, el corazón se alborota. Y no, no es que seas hincha de Danubio o de Stockolmo, es que por un rato estás jugando a ponerte en la piel de un hincha, o de uno de esos jugadores. Imaginarse ser entrenador de esos equipos, tomando decisiones, pero viéndolo de afuera.

La temporada está en juego y esta vez Danubio, en un final incierto, en un final de infarto, se llevó el primer punto de una serie que podría cerrar el próximo miércoles si volviera a vencer.

Stockolmo llevaba el favoritismo, porque fue el equipo que llegó a esta instancia en el cuarto puesto. Pero Danubio trajo la competitividad, esa que lo hizo terminar apenas detrás, en el quinto lugar, y superar el cruce de octavos de final frente a Miramar.

Mateo Giano puso 21 puntos para el azul, pero otros 21 puso Martín Chervo para los de la Curva. Fueron 19 las unidades que aportó Anthony Danridge en Stockolmo, pero lo emparejó Ángel Varela, que tuvo el atrevimiento de poner un triplazo para pasar al frente a falta de 24 segundos.

Es cierto que el mismo Danridge luego metió dos libres que le daban a Stockolmo la ventaja, pero Sebastián Álvarez anotó el doble que pintó el marcador final y lo dejó a él como el tercer máximo anotador de su equipo con 15 puntos.

Danubio, con su competitividad, esa que le permitió traer ocho puntos de desventaja y que el partido cambiara de manos varias veces durante el último cuarto, se llevó el primer punto de la serie. No está dicha la última palabra, habrá segundo juego el miércoles. Los dos querrán ganar, la diferencia es que si Stockolmo no lo consigue, verá el resto del torneo por televisión.

Dos platos

A segunda hora las emociones no faltaron, en un encuentro en el que Unión Atlética derrotó a Lagomar por 72-71. Lo hizo con un triple de Joaquín Dios sobre la chicharra del reloj de posesión, cuando quedaban 6 segundos para el final y su equipo perdía por dos puntos.

Hasta ese triple, el parcial del último cuarto estaba igualado 10-10, con un goleo muy bajo, propio de minutos muy nerviosos y jugados a alta intensidad entre dos clubes que sabían la importancia de pegar primero.

Finalmente el resultado fue favorable al azulgrana, que derrotó en este primer choque al mejor de la fase regular e irá el miércoles por completar la gesta para meterse en semifinales, a buscar el ascenso.