Los goles de Giorgian de Arrascaeta no fueron suficientes para clasificar a Uruguay a la siguiente fase. En su mejor presentación en Qatar 2022, Uruguay demostró que en su versión más ofensiva es capaz de lograr grandes resultados. A un gol de la clasificación, nos despedimos de Qatar 2022.
Fútbol cíclico
Como un recuerdo vívido de Sudáfrica 2010, algunos hechos puntuales se repitieron y marcaron un partido cargado de épica, rivalidad futbolística y previa maximizada mediáticamente: un penal errado, un buen desempeño de Luis Suárez y una victoria que podría ser fundamental para avanzar a la siguiente fase.
A los 15 minutos llegó la primera situación para la selección africana. Un potente tiro de André Ayew que Sergio Rochet no pudo retener y en el rebote cometió falta sobre Jordan Ayew.
En principio fue desacreditada por offside, pero el VAR definió que no existía fuera de juego. Fue Rochet quien enmendó su error inicial al atajar sólidamente abajo y mantener el empate.
Minutos más tarde, Darwin Núñez intentó por primera vez y se la picó a Lawrence Ati-Zigi, pero Mohammed Salisu llegó justo para salvar a la selección africana.
Giorgian de Arrascaeta y Luis Suáres, luego del primer gol de Uruguay a Ghana.
Foto: Khaled Desouki, AFP
La apertura no tardó en llegar. Suárez recibió un centro cruzado de Facundo Pellistri e hizo destrozos con los defensas que quedaban en el área. Su definición fue interceptada por Ati-Zigi y llegó oportunamente De Arrascaeta para empujarla con la cabeza y llenarse la boca de gol. Finalmente, se abrió el arco para la celeste en Qatar 2022.
Giorgian De Arrascaeta, en el instante en que convierte el primer gol a Ghana.
Foto: François Xavier Marit, AFP
Una jugada que comenzó nuevamente Pellistri por la derecha seis minutos después, cambió para Darwin que la elevó para que otra vez el número diez de la selección inflara la red con un remate de volea digna de un mundial. Nada pudo hacer el golero ghanés: la pelota pasó por abajo de su pierna, a toda velocidad.
No podía ser todo color celeste. Rodrigo Bentancur se retiró lesionado luego de aportar mucha marca al juego que planteaba el equipo de Diego Alonso: siete recuperaciones de las 20 que Uruguay efectuó en el primer tiempo.
Uruguay continuó atacando incesantemente hasta el fin de la primera mitad, con la ventaja de que su saldo de goles lo posicionaba mejor en la tabla. Todavía importaba lo que pasaba en el estadio Ciudad de la Educación entre Corea del Sur y Portugal, que provisoriamente empataban 1-1.
Desenlace
Ghana salió a presionar desde los primeros minutos del segundo tiempo, por lo cual dejó espacios atrás, y Uruguay generó nuevas jugadas de contragolpe. Se revisó un posible penal por VAR sobre Darwin Núñez, pero se decidieron por omitir la jugada.
65 minutos transcurrían cuando Suárez y Pellistri intercambiaron lugares por sus compañeros de equipo Nicolás de la Cruz y Edinson Cavani. La idea era mantenerse fuertes en ataque y continuar con el planteo ofensivo.
Consecuencia de jugadas alternadas, Ghana supo arrinconar a Uruguay en un momento complejo del partido, cerca de los 80 minutos. Ahí se hicieron dos variantes más: Agustín Canobbio, en su debut mundialista, entró por Darwin Núñez, y el jugador del partido, Giorgian de Arrascaeta, fue sustituido por Maximiliano Gómez. Nuevamente, la ofensiva era prioridad para Alonso.
El duelo de guardametas se llevó al extremo en el último tercio del partido. Sergio Rochet cubrió el arco celeste notablemente y Ati-Zigi tomó protagonismo atajando varios disparos de Federico Valverde y Maxi Gómez, además de un cabezazo de Cavani posteriormente invalidado.
Cuando comenzaban los ocho minutos de adición, el partido simultáneo finalizó con victoria de Corea del Sur sobre Portugal 2-1. Ese resultado les daba a los asiáticos la clasificación a octavos. En el estadio de la Ciudad de la Educación se encontraron en el centro de la cancha para esperar el final del otro partido del grupo H, que miraron desde un celular. En las tribunas la imagen fue la misma.
En los minutos finales Uruguay se volcó al ataque por entero buscando el milagro. Coates y Giménez terminaron jugando de nueve. De la Cruz tuvo la última jugada, de pelota quieta, pero no la pudo resolver bien.
Datos
Coates aportó siete despejes, mientras que José María Giménez hizo lo mismo en nueve oportunidades. Dos jugadores clave, junto a Rochet, para mantener el cero en el arco celeste.
Al final, la terna arbitral repartió tarjetas ante las discusiones con jugadores uruguayos que reclamaron por las últimas decisiones.
Dos más
Con el desenlace del grupo H se sumaron dos equipos a la siguiente fase de Qatar 2022: Portugal, que espera rival entre Serbia, Camerún y Suiza para el martes, y Corea del Sur, que se medirá con Brasil el lunes.
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