Con un gol de Guillermo May asistido por el argentino Aaron Spetale y el primero de Brian Lozano con la camiseta aurinegra, se selló el empate 1-1 entre Peñarol y Danubio, igualdad que fue justa, pero que no le sirvió a ninguno en sus intenciones de escalar posiciones en el Torneo Clausura.
Fiesta en cuatro colores
En el Campeón del Siglo hubo una fiesta porque se enfrentaron dos equipos muy fuertes. Más allá de las tablas, de los resultados, de los números, se midieron dos conjuntos con identidad, con historia, con mística.
El logo de los Rolling Stones invadió la tribuna Güelfi, espacio que Peñarol reservó para los franjeados, que saben de buena música y representan algo que todo futbolero tiene por obvio: el fútbol y el rock van de la mano. ¿Es la de Danubio la hinchada más rollinga del fútbol uruguayo?
Otra veneración fue la camiseta danubiana, que con un diseño muy moderno pretende emular su primera casaca. Una moña por su génesis escolar, el barco por el origen búlgaro de sus fundadores, el birrete de graduación por ser “la universidad del fútbol”, las cuatro estrellas por los títulos locales, las fechas de los logros y la leyenda “Alma de La Curva”. La prenda habla por sí sola.
Unos por otros
Lo cierto es que ambos tenían la intención de escalar. Danubio pudo mantener el invicto y es uno de tres, junto con River y Deportivo Maldonado, que no han perdido. Lo logró, pero también tuvo para ganarlo –sobre todo en el último tiro libre–. Peñarol sabe que si quiere pelear el Campeonato Uruguayo debe ganar el Clausura. Tras el 1-1, queda lejos de la muestra.
En algún sentido, Peñarol pensó en el clásico. El delantero aurinegro que se viene destacando, Ignacio Laquintana, no fue citado por Leo Ramos debido a que tenía cuatro amarillas y en caso de recibir una más se hubiera quedado sin jugar el clásico del próximo fin de semana. Por lo tanto, volvió el juvenil Nicolas Rossi, tras disputar la Copa Intercontinental Sub 20. Resumen: Peñarol extrañó a Laquintana.
En lo que sí acertó Ramos fue en darle más minutos a Brian Lozano, quien volvió a jugar el lunes en Paysandú tras superar una contractura y en el Campeón del Siglo se mostró picante, y además se hizo grande en tierra de gigantes para meter su primer gol en Peñarol de cabeza.
Otro que no estuvo fue Kevin Dawson. El arquero fue expulsado luego de que terminara el encuentro frente a Deportivo Maldonado y en su lugar estuvo Thiago Cardozo, quien hizo una muy buena tarea, cuidándole el arco como quien cuida a un bebé.
Además, Matías Aguirregaray jugó en lugar de Ezequiel Busquets y Ruben Bentancourt volvió a ser titular, al igual que en el encuentro ante Deportivo, en lugar de Hernán Rivero, que tiene la misma cantidad de amonestaciones que Laquintana. Lo acompañó en la delantera Kevin Méndez, en lugar de Lucas Viatri.
Lindo de ver
El público se olvidó de lo fea que estaba la cancha por lo lindo que estaba el partido. Los primeros minutos fueron del manya y se destacó Esteban Conde parándole un tiro a Lozano. Llegando a la media hora se despertó el Danu. Sebastián Fernández sacó un bombazo de larga distancia que pasó muy cerca y luego volvió a probar con un cabezazo, bien atajado por Cardozo. La alegría estaba reservada para May, que abrió el marcador tras la asistencia de Aaron Spetale, el joven argentino que prometió levantar a la franja cuando se insertó en el equipo, que hasta ahora está cumpliendo con creces.
Otro que cumplió con creces fue Cardozo, que evitó el segundo de Danubio en varias ocasiones. El mismo nivel de buen desempeño tuvo Lozano. El delantero le dio mucho trabajo a Conde, que actuó notable.
El que trabaja sin parar obtiene recompensa: a los 67’ Lozano fue vivo para cabecear y mandarla adentro. Por el empate y porque a los minutos se fue expulsado Diego Vicente, parecía que Peñarol daría vuelta el resultado. No pasó: Danubio marcó bien y a Peñarol lo desordenaron los nervios. Quiso, pero no pudo. Para peor, hablando de nervios, en el final Hernán Menosse fue a marcar con todo, hizo falta, le sacaron la segunda amarilla y se fue expulsado, con lo que se pierde el clásico la semana que viene.