Tras el triunfo de Peñarol en el clásico de verano, el entrenador, Alfredo Arias, habló con la prensa y fue crítico con sus futbolistas.
“Es el primer clásico, pero sabemos que a veces marcan cosas y al menos pudimos irnos ganándolo. Me queda la alegría de ganar, la primera copa está en casa, pero el objetivo está más allá de este partido. No puedo perder de vista lo que va a servir, que es corregir y mejorar”, comenzó el entrenador.
Sobre los 90 minutos de juego, analizó que Peñarol comenzó mejor, “haciendo cosas muy buenas”, lo que rápidamente se reflejó en el marcador. “Pero en unas pelotas quietas fallamos, marcamos mal e incluso el segundo gol de ellos fue en contra”, sostuvo.
“Nos tiraron pelotas al área, no supimos resolver y vamos a tener que empezar desde ahí para atrás. Me preocupó porque de arriba nos ganaron fácil. Nos hicieron entrar en dudas y después se hizo un partido parejo”, analizó.
Sobre ese momento del partido, Arias destacó que su equipo “no se hundió”, sino todo lo contrario. “Que te empaten prácticamente sin jugar, con dos pelotas quietas, a veces te juega en contra anímicamente. Pero aguantamos el chaparrón, el equipo reaccionó bien y lo hablamos en el entretiempo. Fue un partido parejo”, concluyó.
Arias también habló sobre el debut de Léo Coelho, que se dio al final de la disputa: “Hubiese preferido no ponerlo porque había una carga emocional muy grande para él, pero la tarjeta amarilla mostrada a Yonatthan Rak lo “condicionó”. “Hablé con él y me dio la razón, porque no tenía nada para ganar y mucho para perder. Pero me pidió ir al banco y lo puse por si lo necesitaba”, explicó.
Por último, habló de las incorporaciones del conjunto mirasol para esta temporada, dejando en claro que hay jugadores que no están al nivel necesario para rendir como el equipo requiere. “Ninguno quiere salir en un clásico, pero estoy para tomar las decisiones y creí que alguno tenía que salir a pesar de haber tenido un buen desempeño. Estaban decayendo en el nivel físico y no llegábamos a cubrir algunos sectores de la cancha. Los jóvenes entraron bien, y terminamos con ocho jugadores formados en Peñarol. El equipo reaccionó muy bien cuando ellos entraron”, sostuvo.
Por otra parte, se destacó la presencia de Thiago Cardozo en el arco, quien recientemente perdió a su hermano en un accidente de tránsito, motivo por el que se ausentó de los encuentros ante San Lorenzo y Unión de Santa Fe. Cardozo no solo decidió estar en el clásico, sino que además tuvo una gran actuación atajando un penal ejecutado por Gastón Pereiro. “Lo de Thiago es admirable, le dije que hiciera lo que quisiera y me pidió venir a entrenar, porque decidió hacer el proceso con sus compañeros, trabajando y haciendo lo que está acostumbrado a hacer”, explicó Arias. “Es un muchacho muy inteligente al que le pasaron cosas muy graves e importantes, no sé si estaba para jugar”, finalizó.
Alegría amarilla y negra
La alegría de los carboneros por la ventaja clásica se hizo presente en las redes sociales. Peñarol publicó en su cuenta oficial un video en el que Ignacio Laquintana -autor de los dos tantos mirasoles-, saluda con la icónica frase de un personaje de humor interpretado por Guillermo Francella: “Hermosa mañana, ¿verdad?”, que rápidamente se viralizó.