En el estadio Centenario, Peñarol goleó 3-0 a River Plate. Franco González, Camilo Mayada y Matías Arezo aportaron los tantos del mirasol, que sigue liderando el Torneo Clausura, ahora con 17 puntos, cuatro más que su escolta Liverpool, que juega el lunes contra Montevideo City Torque.
Fútbol en dos colores
En un domingo húmedo, el partido comenzó entreverado, sin mucha intensidad y con la novedad de que en el conjunto visitante Sebastián Cristóforo se metió en el 11 inicial a poco de comenzar el partido, debido a que Damián García se sintió en el calentamiento.
En el inicio, la tenencia de la pelota era compartida y el encuentro se disputaba en la mitad de la cancha. Poco a poco, Peñarol fue tomando las riendas y se fue consolidando como el dueño del balón, con destellos de supremacía, como cuando llegó el primer acercamiento en los pies de Sebastián Rodríguez, luego de que Cepillo González perdiera la pelota cerca del área.
A los pocos minutos de ese primer acercamiento, Guillermo de Amores evitó que se abriera el marcador tras una buena incursión ofensiva de River Plate luego del tiro de esquina de Matías Alfonso.
En ese momento el partido se llenó de pelotas largas e imprecisiones, y, cuando parecía que no estaba para ninguno, Cepillo se encargó de abrir el marcador. Fue a la media hora de juego cuando Seba Rodríguez aprovechó la caída de Barboza en la salida darsenera –que quería salir jugando de su propia área y con la presión de los carboneros–. Rodríguez recuperó la pelota y se la dejó en los pies al campeón del mundo, que definió solo, en el área chica, con el arco enorme.
Los dirigidos por Darío Rodríguez terminaron de establecerse en el césped como superiores, teniendo la pelota y sabiendo qué hacer con ella, generando peligro ante un darsenero tibio, que no encontró nunca los espacios para vulnerar al rival.
Eso quedó plasmado cuando, a los pocos minutos de abrir el marcador, los visitantes aumentaron la ventaja. Valentín Rodríguez mandó una pelota espectacular para que Mayada la mandara a guardar de cabeza en su primer grito de gol aurinegro. Para dejar en claro quién estaba mejor, antes de ir al descanso una tapada de De Amores valió como un gol.
Para el complemento, Ignacio Ithurralde hizo modificaciones en la ofensiva buscando cambiar la pisada en el frente de ataque, pero cuando terminó de ingresar Pablo García por Pablo López llegó el tercero del aurinegro, de la mano del goleador Arezo, que hizo cumplir la ley del ex.
Los aurinegros, que pudieron copar la tribuna Ámsterdam por el acuerdo entre dirigentes de ambos equipos –quienes decidieron que la disputa se jugara en el estadio Centenario en lugar del Parque Saroldi–, se despidieron del partido al ritmo de “cada día te quiero más”, sustituyendo los cánticos que reclaman a los jugadores y que se pudieron escuchar en los partidos anteriores, cuando el manya no mostró grandes ideas a pesar de la victoria.
Peñarol continúa invicto en el Clausura, alcanzó la quinta victoria al hilo tras dos empates iniciales. Con este triunfo obliga a ganar a Liverpool, que hasta que juegue tiene 4 puntos de distancia, y también a Nacional, que tras el cambio de técnico quiere no perder pisada.