El elenco mirasol deberá pagar una multa tras el partido clásico que terminó en empate sin goles frente a su tradicional rival, el Club Nacional de Fútbol. Se puede decir que el partido se sumó a la lista de olvidables 0-0, si es que se le puede llamar “olvidable”.

El partido jugado el viernes 28 de marzo en el Campeón del Siglo tuvo la anécdota para contar de los proyectiles. El mismo método que utilizó un hincha de Rosario Central para pegarle cerca del ojo a Maxi Olivera, lo utilizaron algunas personas parciales de Peñarol al arrojar botellas a la cancha.

El clásico estuvo parado tres veces por estos hechos. Ninguno de los proyectiles impactó en nadie. El árbitro, Mathías de Armas, continuó con el partido cuando recibió la garantía de la Policía.

La Comisión Disciplinaria de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) sancionó a Peñarol por estos incidentes que se produjeron dentro del escenario y no le compete decidir por los hechos ocurridos fuera del Campeón del Siglo. La suma que deberá pagar el club alcanza 171.957 pesos.

El fallo “determina la existencia de responsabilidad objetiva de parte del Club Atlético Peñarol”, al cual le impone una multa de 100 unidades reajustables, “según lo dispuesto por el artículo 14.1 literal c del Código Disciplinario”. Peñarol ya había sido advertido en ocasiones anteriores, lo que determinó la multa.