A falta de un mes para que comiencen los Juegos Olímpicos de París -el 26 de julio-, las aguas del río Sena no están aptas para el baño por los elevados niveles de contaminación que se observaron en los últimos análisis elaborados hace algunos días. Pero, pese a esto, los organizadores de la máxima cita del deporte se mantienen optimistas sobre la mejora de la situación para el correcto desarrollo de las pruebas de natación en el río.

“Actualmente, la calidad del agua del Sena no está a la altura. Pero los análisis no corresponden a los estándares que tendremos este verano”, aseguró el delegado del gobierno, Marc Guillaume, que se mostró confiado en que los niveles de contaminación sean inferiores a finales de julio o principios de agosto.

Está previsto que en París 2024 el río Sena, que atraviesa la capital gala, sea el escenario de la prueba de natación del triatlón, programado para el 30 de julio para los varones, el 31 para las mujeres y el 5 de agosto para el relevo mixto. Además allí se realizará el maratón en aguas abiertas el 8 de agosto para mujeres y el 9 para varones.

“Tenemos confianza, junto con el Comité de Organización, sobre la posibilidad de mantener esas pruebas”, agregó la autoridad.

Según el informe semanal publicado por la alcaldía de París y la prefectura regional, las malas condiciones meteorológicas de los últimos días explican el alza de las concentraciones de dos bacterias fecales -enterococos y Escherichia coli- en el río. “La calidad del agua sigue deteriorándose como consecuencia de las desfavorables condiciones hidrológicas y meteorológicas: lluvia, gran caudal, pocas horas de sol, temperaturas por debajo” de lo normal, explicaron las autoridades locales.

“En algún momento dejará de llover, tendremos sol. Y lo que podemos decir es que las obras llevadas a cabo en los últimos cuatro años están totalmente operativas y nos permitirán tener un resultado excepcional”, afirmó Guillaume, quien sostuvo que se siguen inaugurando centrales de depuración de agua y captación de residuos, y que todos los barcos del Sena están ya conectados a la red de alcantarillado de la ciudad y no vierten sus aguas residuales al cauce.

Las autoridades francesas invirtieron 1.400 millones de euros desde 2016 en un ambicioso plan para permitir el baño en las aguas del Sena, que desde hace casi un siglo están vetadas. Se trata de unos de los proyectos más emblemáticos de estos juegos, y se esperaba dejar un río limpio como legado.

Uruguay estará representado en natación en los Juegos Olímpicos por Nicole Frank y Leo Nolles; ambos accedieron a la competencia por cupos de universalidad.

En este caso, el ranking mundial ya cerró, y como ningún nadador consiguió la marca A clasificatoria, el Comité Olímpico Nacional utilizará cupos de universalidad para un varón y una mujer que otorga la World Aquatics, la Federación Internacional de Natación.