El horizonte cada vez queda más lejos. Los atletas superan marcas establecidas que pasan al olvido al ser mejoradas. Evolución constante en el afán de elevar la meta. París 2024 no fue la excepción, un montón de récords mundiales y olímpicos se rompieron con actuaciones que quedarán para la mejor historia del deporte olímpico.
Mijaín López y el quinquenio cubano
El Gigante de Herradura, como se apoda al luchador cubano, consiguió el oro por quinta vez de forma consecutiva. Alcanzó un hito inédito en el olimpismo que empezó en Beijing 2008 y culminó en la capital francesa, donde le ganó el combate de lucha grecorromana hasta 130 kilos a su compatriota Yasmani Acosta –que lucha por Chile–.
En pleno festejo, se sacó las botas y las dejó en el centro del tapiz. A los 41 años se retiró con un beso del lugar que lo llenó de alegrías, esas que incluso exceden las cinco medallas doradas. “Dejar eso en el colchón es como que estás dejando algo de tu vida. Desde muy temprana edad me vinculé con este deporte, un deporte que me ha hecho reconocido a nivel mundial. Dejé un sueño en los colchones, pero un sueño que va a dar inspiración a todos los jóvenes”, dijo el luchador a Olympics.com.
Descansará la leyenda. El tiempo dirá si las virtudes –y la biología– les permiten a otros deportistas lograr la hazaña de ser los mejores en lo suyo durante 20 años o más. Desafío ultra complejo.
La sirena canadiense
A sus 17 años, la actuación de Summer McIntosh revolucionó las aguas de París. La nadadora canadiense se llevó tres medallas de oro y una de plata de la capital francesa. Ganó en 200 metros mariposa y 200 metros combinados, en ambas pruebas estableció récord olímpico. En 400 metros combinados fue dorada y sigue ostentando el récord mundial que obtuvo el 15 de mayo en Toronto con tiempo 4:24.38. En 400 metros libres fue segunda.
También participó en las pruebas por equipos, en las que arañó el podio tanto en relevo 4x100 estilos como en relevo 4x100 libres. Canadá, en las dos oportunidades, culminó en la cuarta colocación.
Abriendo las aguas
Pan Zhanle se coronó en los 100 metros libres masculino. En la final, se colgó la medalla de oro y con tiempo 46.40 estableció un nuevo récord mundial; rompió la marca que él mismo mantenía desde febrero en 46.80. Vale reafirmar esto: 40 centésimas es un abismo en la natación. Sólo basta con fijarse en cómo se rompen los récords para darse cuenta de que son por mucho menos.
El nadador chino de 20 años, además, también consiguió el oro en 4x100 combinados masculino y la plata en 4x100 combinados mixto.
El sueco que tocó el cielo
Armand Duplantis superó en un centímetro su propio récord al saltar 6.25 metros en salto con garrocha. Una de las principales locuras sucedidas en París, superó por 30 centímetros al estadounidense Sam Kendricks, que terminó segundo. El atleta sueco de 24 años paralizó el planeta el 5 de agosto con una de las actuaciones individuales más fantásticas de la competencia olímpica.
Duplantis es el rey del salto con pértiga (o garrocha) desde hace años. Al oro de París 2024 hay que sumarle la presea dorada en Tokio 2020; también tiene cuatro mundiales ganados, dos en pista cubierta (2022 y 2024) y los otros al aire libre (2022 y 2023), además de cuatro campeonatos europeos (2018, 2021, 2022 y 2024).
Apodado Mondo, Duplantis nació el 10 de noviembre de 1999 en Lafayette, Luisiana. Su padre, Greg Duplantis, también fue saltador con garrocha y uno de los primeros entrenadores de su hijo. Su madre, Helena Hedlund, es sueca y también fue atleta, en su caso en el heptatlón. Tras mucha insistencia de la Asociación Sueca de Atletismo desde 2015, cuando Duplantis era un chiquilín que ya tenía varios récords, la decisión familiar lo llevó a competir bajo la bandera del país europeo. Hoy en día es el deportista con más visibilidad en Suecia, incluso por encima de Zlatan Ibrahimović.
Especialista de fondo
Joshua Cheptegei rompió el récord olímpico de los 10.000 metros masculino al quedarse con el oro con tiempo 26:43.14 y superó al etíope Kenenisa Bekele, que arrastraba el 27:01.17 desde Beijing 2008. El ugandés, que fue oro en París, también tiene el tiempo más rápido a nivel mundial logrado en Valencia en 2020 con 26:11.00.
“Estoy muy orgulloso por Uganda. Después del mundial júnior de 10.000 metros, de tres títulos mundiales en 10.000 metros y del récord mundial de 10.000 metros, esta medalla de oro con un récord olímpico completa mi colección”, declaró el atleta de 27 años. El objetivo era el doblete de fondo, pero finalmente –aconsejado por su equipo médico– no compitió en los 5.000 metros para defender el oro conseguido tres años antes en Tokio.
Cada vez levanta más
Karlos May Nasar superó dos récords mundiales diferentes en la competencia de levantamiento de pesas masculino para personas de menos de 89 kilos. Rompió la marca de 224 puntos en envión y alcanzó un puntaje total de 404, números que nunca se habían alcanzado.
Fueron los primeros Juegos Olímpicos para el atleta de 20 años que defiende a Bulgaria pero nació en París, ciudad donde selló su primera medalla olímpica y el récord mundial. Venía de conseguir el título europeo en Sofía este año.
Todos para uno
Estados Unidos se adueñó de una de las pruebas colectivas que despiertan más interés en el atletismo: los 4x400. Ganó el oro tanto en femenino como en masculino. Las mujeres consiguieron un tiempo de 3:15.27 para subir a lo más alto del podio.
Los hombres batieron el récord olímpico con un fantástico 2:54.43, quedando al borde del récord mundial de 2:54.29 que consiguió el país norteamericano en 1993, en la ciudad alemana de Stuttgart.