Uruguay visitó a Venezuela en el estadio Monumental de Maturín bajo un pesado clima caribeño que cayó en forma de lluvia. El equipo celeste, que vistió de blanco, sufrió la lesión de Sebastián Cáceres al minuto de juego. El futbolista peleó con Salomón Rondón y en la carrera se tomó el posterior de su pierna derecha, marcando un dolor definitivo. Nicolás Marichal tuvo que suplantarlo.
Sin embargo, la primera fue del equipo uruguayo de la mano de Brian Rodríguez, quizás la más clara o de las más brillantes del partido. Enganchó como en sus años de Peñarol y demostró con la finta por qué es la alternativa. El arquero venezolano Rafael Romo controló la situación.
Yeferson Soteldo fue un diablo insistente con la pelota atada al pie. Se metió entre las humanidades siempre que pudo, y Uruguay buscó la persecución de Guillermo Varela. Rondón se debatió con Marichal y con Santiago Bueno, los jóvenes defensores uruguayos que, a pesar de su calidad, sufrieron la experiencia del delantero. A los 16 minutos el centrodelantero vinotinto ganó en el aire y su cabezazo se fue apenas ancho ante la mirada del capitán Sergio Rochet. Emiliano Martínez avisó que la juventud no está perdida y los uruguayos creyeron en la rotación y las transiciones cuidadosas del balón. Por momentos Brian y Maxi Araújo fueron inquietantes; por el otro lado, Cristian Kike Olivera y Facundo Pellistri fueron las armas dispuestas por Marcelo Bielsa sobre la mesa de la conversación.
A los 32 minutos Rondón generó una acción que alcanzó lo más preciado, el roce del cuero con las piolas. Sin embargo, a instancias del VAR, el árbitro anuló el tanto. Uruguay perdió pisada y de la mano de Soteldo y Eduard Bello la selección local dominó el final del primer tiempo.
En el complemento los técnicos movieron los bancos de suplentes. Bielsa probó con Miguel Merentiel, que debutó en el máximo sueño futbolero y alegró a todo el pueblo sanducero. Se ganó la amarilla pasado de rosca. Facundo Torres también fue una alternativa por Araújo. Los de Fernando Batista estudiaron el desarrollo del segundo tiempo y movieron piezas. Darwin Machís y Yeferson Savarino entraron en juego y complicaron a la selección uruguaya, que, no obstante, sostuvo los embates locales y aquello fastidió a la vinotinto. Al mismo tiempo le permitió a la novel selección de Bielsa creer en la victoria.
Rochet fue figura. Apareció en varias jugadas con certeza, manejó los tiempos y supo volar para quedarse con el intento de Savarino, que había ingresado para eso. Uruguay pecó de joven, perdió las marcas y sufrió las pelotas quietas, fue impreciso, pero al mismo tiempo jugó con pasión y sostuvo el buen rendimiento local, que buscaba recuperarse de la goleada en Bolivia en la etapa anterior.
La celeste, en plena renovación obligada por las suspensiones y las lesiones, terminó por rescatar un punto. Bielsa volvió a poner y sacar un jugador en el desarrollo del partido, en este caso, Torres, y fiel a su estilo se guardó a Luciano Rodríguez. Sobre el final el árbitro desestimó una mano en el área venezolana que podría haber dado la posibilidad de una hazaña más. Fue empate en Maturín entre venezolanos y uruguayos.
Detalles
Estadio: Monumental (Maturín, Venezuela)
Árbitros: Raphael Claus, Danilo Manis y Rodrigo Correa (brasileños)
Venezuela (0): Rafael Romo, Jon Aramburu, Yordan Osorio, Nahuel Ferraresi, Miguel Navarro, Cristian Cásseres (81’ Tomás Rincón), José Martínez, Eduard Bello (59' Darwin Machís), Telasco Segovia (59' Jefferson Savarino), Yeferson Soteldo y Salomon Rondon (90’ Jhonder Cádiz). Entrenador: Fernando Batista.
Uruguay (0): Sergio Rochet, Guillermo Varela, Santiago Bueno, Sebastián Cáceres (3' Nicolás Marichal), Lucas Olaza, Emiliano Martínez, Manuel Ugarte, Brian Rodríguez (53' Facundo Torres (87’ Nicolás Fonseca)), Facundo Pellistri (87’ Marcelo Saracchi), Maximiliano Araújo (46' Miguel Merentiel) y Cristian Olivera. Entrenador: Marcelo Bielsa.
Goles: ninguno.