En una transacción que se convertirá en la más grande inversión económica –en datos absolutos– de un club uruguayo de fútbol para adquirir la parte mayoritaria de la ficha de un futbolista, por un monto de siete millones de dólares a pagar en cuotas durante dos años Peñarol se queda con el 80% de la ficha de Leonardo Fernández, quien, una vez que esté todo resuelto y firmado, se quedará en el elenco carbonero hasta finales de 2027.
Leo Fernández, que en su vuelta a Uruguay tuvo una actuación excepcional en Peñarol al ser artífice de la gran temporada del equipo que conduce Diego Aguirre con 22 goles y 17 asistencias en 47 partidos.
El futbolista, que surgió en Fénix y cuya ficha pertenece al Toluca, hizo su primera salida en 2016 cuando se fue a Universidad de Chile; después pasó a México, donde jugó en Tigres y en el Toluca, para pasar un semestre de 2023 en Fluminense, donde ganó la Libertadores, y un año después, en 2024, vino a préstamo a Peñarol.
Leonardo Cecilio Fernández, tras su excepcional campaña con los mirasoles, debía volver al Toluca, que aparentemente no iba a contar con él, razón por la que fue buscado por River Plate de Argentina a pedido de Marcelo Gallardo.
El dueño del Toluca, Francisco Sinuaga, le dio la palabra a Ignacio Ruglio de que le dejaría a Peñarol igualar la oferta que le hiciera River Plate; anoche el presidente aurinegro elevó una oferta que el equipo argentino no superó.
La operación se confirmó hoy cuando los millonarios avisaron al club mexicano que salían de la pugna por el eficaz futbolista. River había hecho dos ofertas anteriores, y cuando todo indicaba que se iría al equipo de Marcelo Gallardo porque Peñarol no podría igualar el monto de la transacción, apareció esta inusual propuesta.
Aparentemente, habrá una colecta ideada por el dirigente Guillermo Varela, lo que conduce a pensar en la más grande operación retorno que generó Peñarol al traer de vuelta desde España a Fernando Morena con el aporte de la afición peñarolense bajo el lema de “A Morena lo traemos todos”
Ruglio habló en Carve Deportiva, en el programa Minuto 1, y señaló que Peñarol tiene grandes ídolos, como Fernando Morena, Pablo Bengoechea, Tony Pacheco, “y quizás Leo en un tiempo lo sea, porque ya está prendido en el corazón de la gente. Consideramos que es importante tener un nuevo ídolo por muchos años”.
Fernández seguirá teniendo el más alto salario de los clubes del fútbol uruguayo y deberá construir hasta 2027 una carrera que lo acerque a la idolatría inigualable que generó Fernando Morena en sus pasajes con la camiseta aurinegra. Morena, el mayor goleador aurinegro, se había ido a Rayo Vallecano en agosto de 1979 por 40.000 millones de pesetas –poco más de un millón de dólares–, que más tarde lo vendió a Valencia por una cifra superior, ya que el Nando había hecho unas temporadas excepcionales. A su vez, Valencia, donde Morena compartía delantera con Mario Alberto Kempes, lo terminó vendiendo a Peñarol por una cifra ligeramente superior al millón de dólares, pero que seguramente representaba muchísimo más trasladada a nuestros días, en la muy recordada operación ideada y liderada por Washington Cataldi.
La transacción por Fernández cuenta con la presupuestación ideada por Ruglio y Eduardo Zaidensztat e implica un pago en cuotas hasta que termine la conducción de la actual directiva.