Importantísima victoria de Defensor Sporting sobre Wanderers por 2-1, que le permite al equipo de Ignacio Ithurralde acomodarse en los primeros cuatro puestos de la Anual, y además trepar a la tercera ubicación del Clausura, un punto por debajo del segundo, que es Montevideo City Torque, y junto con Boston River a seis de Peñarol.
Para Wanderers, que hizo su mejor partido de los últimos tiempos, se complica impensadamente la cosa con el descenso, porque si quitamos al ya descendido River Plate y a Miramar Misiones, que está bastante hundido, queda muy cerquita de los que no duplican, como Plaza Colonia, dado que está estacionado en 76 puntos, uno más que Progreso y dos más que Cerro, en el grupo de los afligidos por el tercer descenso.
El Parque Rodó
Bonito espectáculo, hermoso escenario, linda noche, aunque mucho más fresca de lo esperado. El partido comenzó y casi de inmediato Defensor tuvo una oportunidad hermosa para abrir el marcador, y la hermosura estuvo dada por la concepción antigua y clásica de la jugada, con Lucas Agazzi desbordando por derecha hasta el fondo y mandando un centro-pase para el ingreso solitario de Lautaro Navarro, que, sin embargo, no pudo llegar a definir correctamente, cuando las posibilidades de gol eran altísimas. El hijo del Chino terminó empujando la pelota a metros de la línea final, pero pasó por el lado de afuera.
A partir de allí, y quizás por esa jugada y por su concepción clásica de fútbol, Defensor empezó a dejar la idea de que era un equipo que estaba mejor en la cancha y que podría generar diferencias en la contienda con el equipo bohemio, muy castigado por las frustraciones y la ausencia de triunfos que, juntas, hicieron un cóctel explosivo que los dejaron cerca de las posiciones del descenso.
Wanderers lo emparejó bien, presionando la salida defensorista, y por momentos el partido quedó nivelado. Aunque, tal vez por su ensanchamiento de campo y el juego abierto, siempre quedaba la idea de que el equipo de Ithurralde estaba más cerca del gol. De hecho, llegando a la media hora, otra vez el jovencito Navarro estuvo cerca de anotar.
Después se fue estancando el nivel de juego ofensivo de ambos, pero casi siempre con la postura del local con la pelota y el visitante procurando salir en transiciones rápidas, que pocas veces, o casi ninguna, pudo prosperar. La primera parte se cerró por debajo de las expectativas de lo que ellos mismos habían sembrado durante el arranque del juego.
Cuando llegaron los goles
Después de los vestuarios, los equipos salieron prácticamente con el mismo guion con el que habían arrancado el partido, y por ello no fue de extrañar que esta vez, a los cuatro del segundo tiempo, llegara la apertura del marcador por parte de Defensor. Fue en una pelota quieta que los violetas habían ejecutado sin que tuviese peligro, pero, sin embargo, tras los rebotes, en uno de ellos la tomó el zaguero Juan Viacava, que como si estuviera jugando fútbol de salón, pivoteó hacia atrás para que Alexander Machado, tapadísimo, pudiese definir con un remate de derecha cruzado que se incrustó en el caño derecho de Jhony da Silva.
Pareció que Defensor podía galvanizar su superioridad después del gol, pero un poco después, con dos grandes jugadas consecutivas de Rodrigo Rivero, una de ellas reventando el travesaño y la otra con una salvada de Kevin Dawson, llegó el empate de Wanderers por parte de Paulo Lima, que después de un córner que fue cabeceado en el primer palo entró por el segundo a centímetros de la línea del gol para empujarla, inflar las redes e, increíblemente, anotar recién el tercer gol de Wanderers en todo el campeonato. Sí, sólo tres goles lleva marcados Wanderers en diez fechas del Clausura.
Pero no pasó mucho rato para que la viola volviera a comandar el marcador, porque, en una buena combinación entre los ingresados Nicolás Wunsch y Diego Abreu, la pelota llegó al centro del área y en el intento bohemio por resolver la situación la bocha derivó hacia la posición por donde venía ingresando Agazzi, que resolvió frente a Da Silva para poner el 2-1 cuando apenas atravesábamos los 22 minutos del complemento.
Wanderers, aun en la derrota, procuró volver a llegar al gol y sus ataques fueron casi continuos, con una gran ascendencia del coloniense Rodrigo Chino Rivero, que hizo un partido muy interesante, pero a pesar de poner en cuestión algunas situaciones defensivas de la viola no pudo llegar al empate.
Defensor viene madurando un tipo de juego que aún está desbalanceado desde el punto de vista de la falta de acierto defensivo en algunas circunstancias, pero que genera expectativa en ataque.
Wanderers también mejoró, pero ya empieza a moverse en un espiral de frustraciones que parece que no permitiera, ni aun jugando bien, conseguir resultados positivos.