Boston River visitó a Independiente de Avellaneda en el Libertadores de América, alias Enrique Bochini, por la segunda fecha del grupo A de la Copa Sudamericana. El sastre llegó tras empatar 3-3 de local en su debut ante Guaraní en un partidazo. Sin embargo, por el torneo local cayó goleado frente a Juventud de Las Piedras. El equipo argentino debutó por la copa visitando a Nacional de Potosí en Bolivia, donde cayó 2-0. Difícil tarea que enfrentará Boston en breve. A la vuelta, el rojo empató con Lanús.

El equipo de Jadson Viera supo plantarse en el Libertadores de América, que también tiene el nombre del más grande jugador del club local, Enrique Bochini. En ese terreno cargado de historia, el Boston, con la suya, del barrio Simón Bolívar, la del técnico que terminó quedándose por segunda vez consecutiva, aunque Nacional lo tentó para que sea su entrenador.

En ese entorno, presionó cuando pudo la salida de Independiente. Luego supo replegarse y salir con la velocidad de Fredy Martínez, con el trabajo de transición de Mauricio Vera. La luz distinta estuvo bajo los pies de Agustín Amado. El rojo de Avellaneda tuvo en Gabriel Ávalos una referencia constante y un peligro vivo para la defensa visitante. Sin embargo, Gerónimo Bortagaray y Martín González estuvieron a la altura. Las dos primeras claras las tuvo Ávalos. Fueron tres jugadas de cabeza por los aires las que dispuso el local en el primer tiempo. Ávalos con el primer aviso, alto; el segundo, luego de una serie de rebotes fortuitos. La tercera chance certera también estuvo en la cabeza de Sebastián Valdez, pero el arquero sastre Bruno Antúnez se lució.

En una de las contras veloces del equipo de Jadson llegó quizás la más clara del primer tiempo. Alexander González enganchó y pateó, pero controló Rodrigo Rey. También lo probó Amado. Boston River, con lo suyo, supo pararse en Avellaneda ante un equipo local que propuso siempre. Álvaro Angulo fue creciendo con el paso de los minutos, llegó dos veces a la raya final para tirar un centro de la muerte y otro sin nombre.

El segundo tiempo presentó un Independiente con cambios que lo adelantaron en la cancha y estresaron al rival. Julio Vaccari puso a Pablo Galdames y Giovanni Millán, y el Boston se apretó en el fondo como ropa mojada. Kevin Lomónaco paró a su equipo en campo rival y el Boston apeló a todas sus artimañas. En cierto momento Martínez robó y atacó con González, que estuvo errático pero activo. Agustín Anello también atacó cuando le quedó el pasillo.

Pero el rojo rompió el score. Fue el chileno Galdames, que había ingresado para eso, para remojar el semblante, para rescatar de lo bueno lo mejor. Recibió de Ávalos, un pivote perfecto, para definir ante la salida de Antúnez. Puso el 1-0 por el que tanto había insistido Independiente. Luciano Cabral casi convirtió el segundo cuando tocó por un costado de Antúnez. También pudo venir después de una combinación de pases en que la tocaron casi todos; Felipe Loyola, que inició la jugada, la fue siguiendo con la mirada, como soñando con el gol. Pero Antúnez tenía una vida. También se quedó con otra prueba de Millán desde lejos que llevaba destino de red. Vaccari movió las piezas para terminar de liquidarlo; Viera para sostener y buscar en algún contragolpe el empate. En la tribuna corearon el nombre de Angulo y aplaudieron a Ávalos cuando se fue sustituido. En la voz de Jadson, lo más parecido a un hincha.

Faltando cinco minutos, Martínez insistió y tiró otro centro de esos complejos para la zaga. Alex Silva pateó como pudo y, en el rebote, Facundo Muñoa empató el partido para Boston River. Aquello se parecía al sueño de varios. Sin embargo, minutos después volvió a mojar Galdames. Recibió un centro desde la derecha y el tiempo le dio hasta para acomodar y pensar dónde definir. Se treparon al alambrado. Boston River compitió en Buenos Aires, pero perdió con Independiente en el Enrique Bochini.

Foto del artículo 'Boston River cayó en Avellaneda con Independiente'