Ganar a lo Peñarol se parece bastante a lo que sucedió en la noche sabatina. El resultado no genera un gran cambio en la tabla y Peñarol sigue lejos de la lucha por el Torneo Apertura, pero aun así sumó puntos importantes pensando en la Anual.

Wanderers comenzó ganando con gol de Bruno Veglio en la primera llegada a fondo. Maximiliano Silvera lo empató para ponerle goles a un primer tiempo de escaso fútbol.

La expulsión de Jaime Báez parecía complicar a Peñarol, que quedó con diez al amanecer del segundo tiempo. Aun así, el carbonero hizo más por ganarlo y encontró el premio sobre el final con el tanto de Tito Villalba.

La forma es un espaldarazo importante para el equipo de Diego Aguirre, pensando en la Copa Libertadores, por la que visitará a Olimpia el próximo miércoles.

Maximiliano Silvera, de Peñarol, tras convertir el primer gol a Wanderers, el 19 de abril en el estadio Parque Alfredo Víctor Viera.

Maximiliano Silvera, de Peñarol, tras convertir el primer gol a Wanderers, el 19 de abril en el estadio Parque Alfredo Víctor Viera.

Foto: Sandro Pereyra, Agencia Gamba

El entrevero del empate

Al partido le costó arrancar, fue todo lento, tedioso y con imprecisiones constantes con el balón en los pies. Entre el frío del anochecer y el espectáculo futbolístico, el café caliente era la única forma de sobrellevar el trámite.

Wanderers se paró con una línea de cinco, con Sebastián Figueredo, que atacó muy bien por derecha y cubrió su sector. Andrew Teuten, en tanto, demoró en el retroceso por izquierda y dejó espacios a sus espaldas.

En una buena combinación entre Nicolás Ferreyra y Figueredo por derecha, llegó la jugada del gol de Wanderers: un centro al medio que atacó bien Veglio por el segundo palo para anotar.

Antes y después de eso, el bohemio prácticamente no inquietó y cuando tuvo la tenencia de la pelota fue inoperante.

Peñarol, en tanto, mejoró cuando cambió de lugar a los volantes ofensivos que fueron por afuera. Umpiérrez por derecha fue incisivo, mientras que Báez no pudo terminar bien las jugadas por izquierda.

Leonardo Fernández, otra vez, fue el mejor. Cuando recibió entre los volantes de contención del rival fue muy astuto para asistir a los que iban por afuera. Así llegó el tanto del empate por intermedio de Silvera, que, con la tranquilidad que lo caracteriza, definió notable. El delantero volvió a anotar, algo que no lograba desde el clásico contra Nacional en la segunda fecha.

El carbonero tuvo algunos ataques por el centro, con Ignacio Sosa desprendiéndose por zona media. Le faltó puntería, los remates se fueron lejos. El primer tiempo se fue con empate y con la sensación de que los dos equipos podían jugar bastante mejor.

Peñarol lo ganó con diez

En el inicio del segundo tiempo, Báez extendió la pierna y golpeó a Mauro Silveira. La infracción fue de roja directa para Javier Burgos.

Aguirre metió cambios para ganarlo, con Diego García y Héctor Tito Villalba a la ofensiva. Peñarol, con diez jugadores, pasó a jugar 4-3-1-1, con Leo Fernández cerca de Villalba, que fue de centro delantero.

Wanderers fue timorato, jugó con uno más, pero prácticamente no ofendió, solamente en un tiro lejano potente de Rodrigo Amaral.

El premio fue para el que lo fue a buscar: Fernández frotó la lámpara por izquierda y Villalba anticipó a varios zagueros para definir. Así lo ganó Peñarol.

Wanderers no tuvo respuesta. Sumó su séptimo partido sin ganar y se sigue complicando en la tabla del descenso.